Enfrente se encontraba Oscar Pedernera, de San Luis. El puntano sacaba un papelito y una birome para tomar nota de cada movimiento. Luego levantaba la cabeza y le preguntó a Raúl: «¿Usted qué edad tiene?». Raúl no duda: «88. Y el sábado que viene cumplo 89. Soy el más veterano de los Juegos».
Nació el 17 de noviembre de 1929 en Huanguelén, partido de Coronel Suárez, un pequeño pueblo de la provincia de Buenos Aires, ubicado a 530 kilómetros de la Capital Federal. 
En la Argentina, en aquel 1929, gobernaba Hipólito Yrigoyen. Radical como él, quien en el regreso de la democracia fue elegido intendente de Carhué en 1983 junto a la Lista 3 de Alfonsín, el otro Raúl. 
Además fue la máxima autoridad municipal; tuvo que lidiar con la terrible inundación de Epecuén, el 10 de noviembre de 1985. Desde hace años vive en Trelew, Chubut, y es la tercera vez que representa a su provincia adoptiva en estos Juegos.
Viudo, cinco hijos, 15 nietos y con 10 bisnietos, disfrutó de los Juegos Nacionales Evita Mayores la actividad fue organizada por las Secretarías de Deportes de la Nación y Río Negro. «La estamos pasando bien. Es muy importante organizar un Juego así. Es una linda experiencia, ayuda a la convivencia y hace que uno siempre se mantenga activo. Siempre me gustó el ajedrez, de joven lo practicaba mucho. También hice otros deportes, pero no en forma notable. Acá en Bariloche hay muy buenos deportistas», comentó.
La sala de planta baja del Hotel Kilton estaba lista para arrancar otra serie. Con sus 88 años, lúcido y memorioso, es un ejemplo para los más chicos y para todos. Porque Raúl, en Bariloche, es el más grande entre los grandes.
Fuente: Secretaría de Deportes de la Nación.