Las nuevas grandes construcciones que se levantan en Pirámides no pasaron por el control provincial

«Pirámides está mutando de villa balnearia en el Patrimonio de la Humanidad a gran negocio inmobiliario. Construcciones de hasta tres pisos se están concretando. A partir de un importante complejo levantado en la costa hubo un compromiso municipal de modificar el Código de Edificación. Hay imponentes inmuebles a la venta en una localidad carente de servicios para tanto crecimiento». Así se encabezaba un artículo de EL CHUBUT, publicado el jueves de esta misma semana y que alarmó al ministro de Infraestructura, Planeamiento y Servicios Públicos de la Provincia, Raúl Chicala, quien no había sido informado de la situación. 
«En realidad no tenemos nada que ver, pero sí vi la noticia», sostuvo ayer el ministro en declaraciones a FM EL CHUBUT. Y denunció que todo ese tipo de construcciones «tendría que haber pasado por (el Ministerio de) Infraestructura, porque para eso nosotros tenemos la Subsecretaría de Planeamiento». 
Además, evidenciando que a primera vista de la situación que se está dando en Puerto Pirámides alerta alguna posible irregularidad, Chicala insistió en que «el planeamiento urbanístico debiera salir de nosotros, pero eso no ocurrió por nosotros y entonces pasó lo que pasó».

«ESTAMOS VIENDO COMO ARREGLARLO»
Sin ocultar malestar por cómo crecen en el Patrimonio de la Humanidad las construcciones de varios pisos y a sabiendas de los problemas con los servicios públicos en Puerto Pirámides, el ministro Chicala se quejó porque «no puede cada uno hacer lo que quiere». 
Volvió a marcar que ningún proyecto de construcción como los que se ven en distintos lugares de la villa de Pirámides pasó por su cartera cuando «todo tiene que pasar por Planeamiento y vemos cómo hacemos la mejor urbanización posible de cada una de las ciudades, pueblos o regiones de la provincia».
Eso no ocurrió, y con el problema encima «estamos tratando de ayudar y ver cómo podemos arreglarlo o aconsejarlos», dijo Chicala. 
Cabe recordar que en 2016 y a raíz de otra polémica construcción que se levantó en la costa de Puerto Pirámides, el intendente Javier Roldán había reconocido que el Código de Edificación estaba «desequilibrado» y que «claramente hay que modificarlo. Estamos en una localidad acostumbrada a edificaciones acordes a lo que es el pueblo, y si hay un edificio frente a la costa es chocante, por eso hay que conservar lo natural del pueblo». 
Dos años después, hay nuevas construcciones que también son «chocantes», apelando a los mismos términos utilizados por Roldán. Además, con el agravante de no haber pasado los proyectos por el área correspondiente de Provincia, según lo denunciado por el ministro de Infraestructura y Planeamiento.