Regionales

La inseguridad pública, un problema al que no le encuentran la solución

Que se puede decir que ya no se haya dicho de la inseguridad pública en la Provincia. Se han cambiado Ministros de Gobierno, Jefes de Policía, se han invertido millones de pesos en patrulleros, motos, bicicletas y en equipamientos técnicos y todo sigue como estaba entonces.

El fracaso ha sido absoluto.
 La delincuencia se maneja a un ritmo y con una tranquilidad preocupante y que genera sospechas de toda índole. Justicia y uniformados suelen deslindar responsabilidades, pero es obvio que las comparten. 
El primero por la benevolencia con que actúan cuando los casos están en sus manos. 
Por lo que se considera un peculiar concepto de los derechos humanos, recobran rápidamente la libertad delincuentes reincidentes, muchos de ellos con pesados antecedentes. Y en cuánto a la Policía, se le atribuyen fallas en la prevención. Lo cierto, lo dramáticamente cierto es que por una razón u otra, los habitantes del Chubut se sienten desprotegidos y librados a su propia suerte.
 La pérdida de confianza en la Justicia y en la Policía ha llegado al extremo que no se denuncian muchos hechos. Y la pérdida de confianza en quienes tienen la obligación de protegerla, es lo peor que le puede ocurrir a la sociedad.

 

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