Cáritas Esquel entregó más de 120 fardos de pasto a pobladores rurales afectados por la sequía y las tucuras

La situación crítica por la falta de agua y alimento para los animales a puesto en riesgo la cría de animales de estos pequeños productores. Por este motivo Caritas Esquel inició hace algunas semanas una campaña de ayuda, siendo esta la segunda entrega de fardos de pastos.
Desde Caritas informaron que la demanda de estos pobladores crece semana a semana por la plaga de la tucura y la sequía que afecta los campos.
Los animales que crían estos pequeños productores son el único sustento para sus familias, advirtiendo que se están quedando sin alimento, sin pastos, por el daño que produce la tucura y sin humedad en el suelo para sobrevivir.
Familias de parajes cada vez más distantes de la meseta buscan desesperados algo que les permita sostener a sus animales, el único sustento económico que poseen y evitar perder lo poco que les queda, mientras las tucuras arrasan con lo poco que queda después de un invierno extremadamente seco, con escasas precipitaciones y sin nevadas que permitieran retener humedad en el suelo. En muchos sectores no hay agua, no hay brotes, no hay pasto. El terreno está totalmente desnudo, los animales caminan largas distancias buscando alimento y se debilitan hasta caer.
Para estas familias rurales, una oveja, una cabra o una vaca no son solo parte del paisaje: son su economía de subsistencia, su alimento, su abrigo y su posibilidad de seguir viviendo en el campo. Cuando un animal muere, la familia pierde parte de su ingreso y parte de su futuro.
Desde Cáritas remarcaron que una vez más fue la solidaridad de la comunidad la que hizo posible esta entrega, pero advirtieron que la demanda supera ampliamente la ayuda disponible. «Los pobladores llegan angustiados, vienen cada vez de más lejos, algunos sin agua para los animales. El alimento se va en el día porque la necesidad es enorme», señalaron.
Por ese motivo apuntan a sostener y profundizar la ayuda. «Cada fardo, cada bolsa, cada aporte colabora para que una familia pueda resistir un poco más en su tierra mientras se espera que las condiciones climáticas mejoren», destacaron.