Nueve presos de la U6 de Rawson que trasladaron de Ezeiza tienen Covid y permanecen aislados

El domingo a las 11 horas ingresaron 18 internos a la Unidad 6 de Rawson, provenientes de la cárcel de Ezeiza, en medio de un fuerte hermetismo, y fueron aislados en un pabellón especial en forma preventiva por la pandemia. Ayer se comprobó que nueve de ellos tienen Covid-19, y se esperan los resultados de otros dos casos sopechosos, según testeos realizados en el Penal de Rawson. Diario EL CHUBUT pudo saber que estos 18 internos ya habían sido rechazados por las cárceles de Neuquén y Río Negro, y por esta razón fueron derivados a Chubut, que decidió aceptarlos. 
Fuentes del Gobierno provincial se remitieron a decir que la información iba a ser comunicada a través de los canales oficiales. Anoche al cierre de esta edición, no había ninguna definición de las autoridades penitenciarias respecto del destino de estos presos. Había mucha preocupación entre el personal de diversas áreas del Penal que recibió a estos internos.

IRREGULARIDADES
El intendente de Rawson, Damián Biss se opuso desde un primer momento a la llegada de estos internos, y le pidió a las autoridades del Penal que no los reciban porque venían de un foco pandémico. Ese mismo domingo circularon mensajes de alerta de los ciudadanos que convocaban a movilizarse temiendo que los trasladados tuvieran Covid-19.
Las autoridades de la U6 respondieron por escrito a la Municipalidad de Rawson, que el Servicio Penitenciario Federal no autoriza traslados de ningún detenenido que sea caso confirmado o sopechoso de Covid-19. «No se efectuará traslado de todo interno/a que se encuentre en aislamiento sanitario caso confirmado, reuna criterio de caso sospechoso, o todo aquel que se encuentre en aislamiento preventivo por contacto estrecho, ingreso o reingreso», dice el comunicado oficial de la U6 del domingo pasado.
Lo curioso es que el escrito detalla que estas indicaciones fueron derivadas «para su aprobación a la Dirección Nacional de Epidemiología y Análisis de la Situación de Salud, dependiente del Ministerio de Salud de la Nación, manifestando la mencionada Dirección Nacional que no presentamos observación a las medidas de prevención a adoptar en relación a los traslados de internos».

NO HABRIAN SIDO TESTEADOS 
Ayer salió a la luz que estos presos al parecer nunca habrían sido testeados antes de dejar la cárcel de Ezeiza. Incluso habría mucho malestar entre el personal del Servicio Penitenciario Federal que participó en el traslado de los presos. No está certificado aún si se tomaron recaudos especiales, considerando que varios agentes intervinieron en los procedimientos. Los sucesivos rechazos de las cárceles de Neuquén y Río Negro, parecen confirmar de antemano las sospechas de que algunos detenidos tenían coronavirus.
Según las fuentes, los ocho internos con Covid-19 y los otros dos casos sospechosos, no tuvieron contacto físico alguno con otros presos ni con el personal que trabaja en la cárcel.
Cuando los internos llegaron el domingo pasado desde Ezeiza, el Penal de Rawson se supone que activó los protocolos sanitarios. En la cárcel asignaron un lugar especial con una capacidad máxima de 20 personas, que son monitoreadas por personal designado para desempeñar esa función.
El traslado de los internos es competencia del Servicio Penitenciario Federal, cuya interventora es María Laura Garrigós, y depende de la ministra de Justicia de la Nación, Marcela Losardo.