La Central Nuclear ATUCHA I ha superado con creces el plazo de su vida útil    

Ante la situación de riesgo en el funcionamiento luego del vencimiento de su original plazo de vida útil, la Autoridad Regulatoria Nuclear otorgó licencia para continuar operando por 5 años a plena potencia (APP) o 10 años calendario a partir de la aprobación de la última revisión periódica de seguridad presentada el 29 de septiembre de 2014, lo que ocurra primero.
El periodista Cristián Basualdo preocupado en saber cuándo vence el plazo otorgado, solicitó el acceso a la Información Pública al presidente del Directorio de la ARN Leonardo Juan Sobehart. El funcionario respondió a la demanda periodística con respuestas evasivas sin clara definición.
La central en cuestión lleva casi 37 años de operación a Plena Potencia, y cumplirá los 5 Años de operación a Plena Potencia según el permiso de la ARN el 4 de junio de 2024.
Es decir que estamos al borde del funcionamiento regular y autorizado por la ARN. 
Los sistemas, las estructuras y los componentes de una central nuclear, como de cualquier instalación, se deterioran, envejecen, y se desgastan. Algunos tardan poco, otros un poco más, pero todo es cuestión de tiempo, al final del camino siempre está la rotura. Tratándose de una instalación que potencialmente puede producir un daño mayúsculo, es imperioso cumplir con los plazos seguros.
Por eso, controlar el tiempo de funcionamiento de un reactor nuclear es una tarea fundamental para un organismo regulador, sin embargo, la Autoridad Regulatoria Nuclear no lo está haciendo en el caso que nos ocupa.
Como si se lavara las manos, la Autoridad Regulatoria Nuclear dejó de controlar Atucha I.
El medio periodístico pro nuclear Agendar, publicó que si bien la licencia de operación emitida por la Autoridad Regulatoria Nuclear “finalizará en las próximas semanas”, Nucleoeléctrica viene trabajando en la revisión técnica y de documentación necesarias “para que la central siga a plena potencia hasta septiembre, lo que fuentes de la empresa confían se podrá conseguir”. 
De obtener esa prórroga por la ARN, la central podrá seguir generando energía eléctrica durante los meses de invierno y evitar así al sistema tener que reemplazar esa generación con alguna alternativa más costosa.
Por supuesto que no tengo los conocimientos necesarios para una correcta evaluación de esta actitud, pero me surge por lo menos dudosa. La Autoridad Regulatoria Nuclear sabe que Atucha I debe parar a comienzos de junio y decidió echar tierra al asunto, ¿por qué?
El plan nuclear del actual gobierno contempla la extensión de vida de Atucha I. Argentina estuvo entre los 32 países que participaron en la primera cumbre mundial para reimpulsar la energía nuclear, que el Organismo Internacional de Energía Atómica realizó el 21 de marzo en Bélgica. La comitiva fue encabezada por el secretario de Estrategia Nacional, brigadier Jorge Jesús Antelo, quien dijo: “Este año nuestra primera central nuclear, Atucha I, cumple cincuenta años en operación y ya estamos comenzando las actividades de extensión de vida para que opere otros 20 años más”.
La extensión de vida útil que se programa implica operar la arcaica central durante 70 años. De los más de 400 reactores en operación actualmente en el mundo, tan solo 13 han superado los 50 años de operación. ¿No es arriesgado extender la vida de una central construida con tecnología ampliamente superada? 
Los problemas que se derivan de operar reactores añosos son muchos, entre ellos el principal es el envejecimiento conceptual. La central en cuestión fue diseñada y construida siguiendo normas y códigos anteriores a los graves accidentes de Chernobil y Fukushima que obligaron a la revisión total del encuadre normativo, especialmente las normas de seguridad.
 

Nuestro país para Atucha I se apoyó en la industria alemana, el fabricante fue la empresa alemana Kraftwerk Union, subsidiaria de Siemens AG. Kraftwerk Union no existe más, Siemens dejó de fabricar reactores nucleares y Alemania abandonó la energía nuclear.
Es para reflexionar!
(La presente nota ha sido confeccionada siguiendo la publicación del periodista Cristian Basualdo en el boletín del MOVIMIENTO ANTINUCLEAR DE LA REPUBLICA ARGENTINA)