Según explicó el Municipio, fue «a raíz de una serie de reclamos de usuarios y vecinos», que solicitaban esa obra para «personas discapacitadas o con movilidad reducida».
Núñez Maciel indicó que «se pidió la intervención de la Secretaría de Planificación, debido a que el edificio de la pileta fue habilitado en el año 2012, cuando las ordenanzas y las leyes nacionales no exigían este tipo de construcciones especiales».
«Por eso consensuamos con ellos la posibilidad de otorgarles un tiempo prudencial que les permita realizar estas obras que son necesarias y que se adecúan a la normativa que está vigente en la actualidad», agregó.
En este sentido, el responsable de Comercio Municipal contó que «se realizó una inspección para que se pueda avanzar con la confección de los planos y luego reflejarlos en las obras, el tiempo que acordamos, según lo que marca la ordenanza, es de hasta un año para contar con los accesos requeridos».
Asimismo, el funcionario reconoció que «la comisión de la pileta Myfanuy Humphreys cuenta con muy buena predisposición para adecuarse a la normativa vigente en la actualidad, y avanzar en materia de rampas de acceso que faciliten el ingreso y el egreso a la pileta de aquellas personas con una discapacidad motora».