El delantero Sebastián Driussi no recibió el alta médica de la lesión que tuvo en el tobillo izquierdo el pasado 17 de junio y sus chances de jugar el sábado ante San Martín de Tucumán por Copa Argentina en Santiago del Estero son pocas porque no quieren correr riesgos, más aún tras la baja de Maxi Salas.

Driussi, uno de los goleadores del equipo hasta su lesión en el Mundial de Clubes, iba a arrancar la semana con la posibilidad del alta médica, e incluso el mismo Marcelo Gallardo había anunciado su regreso en la conferencia de prensa del fin de semana, pero no se sintió cómodo en los trabajos con pelota y van a tomarse su tiempo.

Vale apuntar, que cuando sufrió la lesión tras hacerle el gol al Urawa se especuló con un parate de al menos dos meses y se pensó que no llegaría al partido por la Copa Libertadores ante Libertad por octavos, pero la evolución fue tan buena que desde la semana pasada se viene evaluando su regreso para este fin de semana.

Con esta duda, suben las acciones de Miguel Borja para jugar de arranque y con la posibilidad de un retoque en el sistema táctico que puede incluir el ingreso desde el minuto inicial de Juanfer Quintero y del chico Juan Cruz Meza para que el equipo pase a jugar un 4-1-4-1 como terminó jugando en el empate sin goles ante San Lorenzo del domingo.

Mientras tanto, sigue con tareas diferenciadas Juan Portillo por una tendinitis por precaución ya que Marcelo Gallardo lo quiere tener listo y disponible la semana que viene cuando jueguen contra Independiente y tenga que darle descanso a Enzo Pérez en la previa al cruce con Libertad en Paraguay el 14 de agosto.