Racing recibió una pésima noticia este jueves por la tarde por la sanción que la Conmebol le aplicó a dos de sus futbolistas. Marcos Rojo fue suspendido por dos partidos, mientras que Bruno Zuculini se ausentará solo en uno. Lo increíble es que ambos fueron expulsados desde el banco de suplentes en la agónica clasificación ante Peñarol en Avellaneda.
Aunque se especulaba incluso con que tanto el ex Boca como el ex River no recibieran siquiera una fecha de sanción, el fallo del ente que regula el fútbol sudamericano parece hasta exagerado con los experimentados futbolistas, sin importar que hayan visto la tarjeta roja estando sentados en el banco de suplentes.
De esta manera, Rojo no estará disponible en ninguno de los duelos ante Vélez por los cuartos de final de la Copa Libertadores. Es un problema extra para el entrenador Gustavo Costas, porque su equipo atraviesa una crisis futbolística muy relacionada a lo defensivo, y el zaguero central llegó hace menos de un mes solamente habilitado para jugar el torneo continental y la Copa Argentina, donde la Academia se medirá nada menos que con River.
Zuculini, por su parte, sí estará a disposición de Costas para el encuentro de vuelta, el que definirá al semifinalista de la llave argentina en la Libertadores. De todos modos, el volante central no está en su mejor momento, por lo que difícilmente hubiera sido titular en la ida en Liniers, el martes 16. Tampoco está asegurada su participación de entrada en la vuelta, una semana después, a menos que surja algún imponderable que “obligue” al DT a mandarlo a la cancha de arranque.
Así, con la sensible baja de Rojo para una contienda tan importante para Racing, Costas tendrá entre las opciones de stopper izquierdo a Agustín García Basso, Nazareno Colombo, Marco Di Césare (perdió terreno con la llegada sólida del ex Unión Franco Pardo, justamente uno de los protagonistas de la victoria histórica ante el Manya en el Cilindro) o, menos probable, el joven Santiago Quirós.