El primer tiempo de la final entre Deportivo Madryn y Gimnasia de Mendoza, en el Vicente López, estuvo plagado de jugadas polémicas, entre ellas dos tantos anulados al conjunto mendocino.
El árbitro Nicolás Ramírez, con la asistencia del VAR, le invalidó dos tantos al Lobo por mano previa en ambas ocasiones.
La primera a los 4 minutos, por mano de Matías Muñoz luego de un cabezazo dentro del área; la segunda en el inicio de una acción ofensiva, un control de Nicolás Servetto -que supuestamente se ayudó con el brazo- y que derivó en un tanto.
Otra acción que reclamaron en Gimnasia fue un posible penal de Recalde, aunque el juez principal dio continuidad al juego.