Este fin de semana arrancan los cuartos de final del torneo de fútbol de primera de la Liga del Oeste y la ausencia de Belgrano de Esquel en esta parte del campeonato es sin dudas la noticia más fuerte que se pueda dar.

Tras los incidentes del partido ante Fontana, el Tribunal de Disciplina de la Liga del Fútbol del Oeste del Chubut suspendió al vicepresidente de la institución del barrio Buenos Aires, Tomás Ulloga, por el lapso de dos años.

También recibió un castigo, en este caso de seis meses, la nueva presidenta Cecilia Espinosa, pero el cimbronazo tuvo continuidad en las últimas horas: la primera división masculina de Belgrano de Esquel recién jugará en la primavera, es decir, en el próximo campeonato.

Tres meses sin competir es demasiado tiempo para una institución que se autopercibe como "el Patrón de la Cordillera”.

Además, su cancha fue suspendida por tres partidos, los primeros tres encuentros que juegue Belgrano de Esquel como local lo deberá hacer en otro terreno de juego. Y bajo este panorama, es difícil seguir.

Martín Lobos se dio cuenta de que era momento de dar un paso al costado y renunciar a la dirección técnica del club que tanto ama.  

“A partir de hoy dejo de ser el director técnico de la primera división del club Belgrano luego de tres años; trabajamos sin descanso, nos rodeamos de buena gente y también nos invadieron de los otros; agradezco a los jugadores que siempre dieron todo, a los dirigentes que fueron siempre sinceros conmigo y a los otros, simplemente los perdono porque las actitudes hablan más de ellos que de mí”, publicó Lobos, en sus redes sociales, tras anunciar su salida.

Señaló además que “al final de todo solo queda la tranquilidad de haber dado todo, de habernos esforzado al máximo y sobre todo el premio mayor es llevarte nuevas amistades y la tranquilidad de poder caminar con total tranquilidad en cualquier cancha sabiendo que ante todo fui una persona leal”.

“Cerré el círculo, fui campeón como jugador, como técnico de inferiores y también de primera, pero nunca hay que dejar de soñar”.

“Gracias a mi familia y en especial a mi Gómez (su pareja) por compartir todo esto conmigo. Será hasta la próxima y muchas gracias por todo”, sentenció Martín Lobos, el ahora ex técnico de Belgrano.