Con la buena noticia de la reincorporación de los defensores Ayrton Costa y Nicolás Figal, recuperados de distintos desgarros, a la par del grupo, el plantel profesional de Boca Juniors realizó este martes un entrenamiento matutino "a puertas abiertas" en el predio que la entidad posee en Ezeiza, con vistas al encuentro del domingo próximo ante Independiente Rivadavia de Mendoza, por la quinta fecha de la zona A del torneo Clausura.
Hasta el momento, el Xeneize no logró triunfos bajo la conducción técnica de Miguel Ángel Russo, que lleva doce encuentros sin victorias, en la racha negativa más larga de la historia del club y posiblemente habrá algún cambio en la formación titular respecto del equipo que igualó 1-1 en la fecha pasada ante Racing en la Bombonera.
Tal como sucedió la semana pasada, en la previa del clásico ante la Academia, Russo volvió a permitir el ingreso de la prensa durante 30 minutos al entrenamiento, donde se observó el trabajo físico de Figal y Costa a la par de sus compañeros.
Costa se recuperó de un desgarro que había sufrido ante Bayern Munich de Alemania en el Mundial de Clubes de los Estados Unidos y volverá a estar a disposición del entrenador luego de más de 45 días de inactividad, mientras que Figal había sufrido una molestia sobre la cicatriz de un antiguo desgarro en la primera fecha del Clausura ante Argentinos Juniors.
Para el encuentro del domingo en el estadio Malvinas Argentinas, en Mendoza, los hinchas de Boca ya agotaron las 9.500 entradas populares que se habían puesto a la venta para la parcialidad visitante, mientras que también se vendían otras 4.500 plateas para los simpatizantes del Xeneize.
Del entrenamiento no participó el mediocampista Malcom Braida, ausente con autorización del cuerpo técnico ya que fue papá en las últimas horas.