La Justicia autorizó a Mauro Icardi a pasar 7 días con sus hijas

Luego de meses de discusiones, que se hicieron públicas por las grabaciones de los propios protagonistas, el Ministerio Público Tutelar determinó que las hijas de Mauro Icardi y Wanda Nara pasen 7 días con su padre, antes de que él vuelva a Turquía.

El permiso otorgado por la Justicia empezó a correr hoy, 27 de junio, y finaliza el 4 de julio. El jugador del Galatasaray recibió permiso para retirar a Francesca e Isabella en el domicilio de su madre. Las niñas podían llevar a sus mascotas y tenían que esperar acompañadas de su niñera.

En cuanto a la pareja del padre, Eugenia "China" Suárez y sus hijos no podrían estar durante los primeros días en el mismo lugar, sino que deberían hacer una incorporación de manera progresiva, con actividades organizadas.

El texto redactado por el Ministerio Público Tutelar también indica: “Hágase saber a la Sra. Nara que deberá facilitar el cumplimiento de la medida cautelar precedentemente dispuesta, bajo apercibimiento de imponerle una multa ejemplar... la que fijo en la suma de PESOS DIEZ MILLONES ($10.000.000) a favor del Hospital de Pediatría ‘Profesor Dr. Juan P. Garrahan…”

Wanda podrá tener contacto con sus hijas mediante videollamadas. Luego de la estadía de las niñas con Mauro Icardi, los ex se volverán a ver en la audiencia de divorcio en Italia, que pasó para el 8 de julio. 

Sin embargo, luego de conocerse la disposición de la revinculación Nara expresó su descontento con un escrito que decía: “Sobre el particular, hago saber que lo sugerido no resulta acorde con las necesidades de las niñas. Así lo considero, en conformidad con lo expresado por ellas mismas en numerosas oportunidades, así como también por los distintos médicos que se expidieron respecto de los ataques de pánico y el cuadro de angustia que presentaron las niñas los días 5 y 6 de junio”.

En otro párrafo dijo: “Por más esfuerzo que realicen, para que las niñas concurran a la casa de su padre, la férrea negativa seguida de los cuadros de angustia que presentan repercutiendo aquello en su salud, son lo que me han llevado a buscar una alternativa que se ajuste a las necesidades de las niñas, cooperando con los encuentros y ofreciendo siempre y en todo momento, que estos tengan lugar en el Chateau o el barrio de Santa Bárbara por cuanto ocurre la crisis”.