Quejas por falta de calefacción en la sede vecinal del barrio Matadero

Explicó que «es un reclamo que vengo haciendo desde tiempo. Vinieron a colocar nuevos caloramas, porque algunos no estaban en condiciones. Habíamos pedido dos caloramas y un termotanque. Y nos acercaron un calorama que se colocó y se cayó. Aparentemente estaba mal hecho el trabajo, porque se cayó el calorama. Entonces empecé a hacer el reclamo, y surgió que tenemos un problema.

El vecino de al lado tiene cerrado el predio que es de la sede. Vino gente de Catastro y dejaron el mojón, comentando que iban a notificar al dueño que alquila la casa de al lado». Hidalgo indicó que «el reclamo por esta situación viene de hace dos meses, cuando empezaron los fríos. Ahora es una heladera esto. Y las familias que vienen a buscar las viandas o los talleristas se pasan de frío. Necesitamos que nos coloquen la calefacción lo antes posible».  

RENOVACION DE AUTORIDADES
Más allá de la falta de calefacción, la dirigente barrial cuestionó el llamado público del Municipio para la renovación de autoridades. «Estábamos terminando de trabajar en el comedor y vimos en las redes sociales que prensa municipal había subido que llamaban a la presentación de la mesa electoral para el barrio».

Al respecto, dijo que «fue un enojo y una tristeza, porque sabemos del pisoteo y manoseo que sucede en el gobierno de Ongarato, donde los presidentes de barrio pareciera que estamos pintados en las sedes vecinales. Por suerte no me siento así, por el apoyo de los vecinos que siempre nos alientan para llegar a las familias y al barrio». 

Entre el 8 y el 12 de agosto «se nos vence el mandato de presidenta del barrio pero esperábamos que nos avisen por nota y no que nos estemos enterando por las redes sociales. Porque es una falta de respeto».

Asimismo, adelantó la intención de seguir al frente de la vecinal. «Voy a seguir planteando todos los trabajos que hemos estado planteando desde hace ya casi tres años, y que no fueron recibidos, como la pasarela, la sede, el barrio, nada. Quiero seguir reclamando por lo que nos corresponde como vecinos: un Estado presente en el barrio».