Municipio cede espacio a Fundación que atiende a jóvenes y adultos con discapacidad

Desde mediados de este año, autoridades de la EUPA habían transmitido al propio intendente Ingram y a autoridades provinciales que, en caso de no acceder a un espacio físico, desde los primeros días del año próximo deberían dejar de funcionar. 
Ante ello, Ingram junto al coordinador de Gabinete municipal, comenzaron a buscar una solución. Producto de ese trabajo, se decidió destinar a la Fundación parte de las instalaciones en el denominado «Hospital Viejo», donde se realizarán algunas refacciones para facilitar las tareas que EUPA lleva adelante.
Para tal fin se firmó un acuerdo entre el intendente Ingram y Gabriela Mansilla, tesorera de la Fundación EUPA.
El documento establece que el comodato es por un año y será exclusivamente para el desarrollo de actividades educativas, institucionales y comunitarias. Allí se implementarán talleres, proyectos de integración, capacitaciones, terapias y acciones vinculadas al fortalecimiento de derechos e inclusión social.

PROMOVER LA INCLUSION Y EL DESARROLLO HUMANO
Durante la firma, Ingram destacó el compromiso del Municipio con las instituciones locales que promueven la inclusión y el desarrollo humano, subrayando que este acuerdo «representa una oportunidad concreta para seguir construyendo una comunidad más justa, participativa e igualitaria».
Cabe recordar que durante la primera gestión del intendente Ingram, el Estado Municipal cedió dos terrenos para EUPA. La actual conducción de la ONG lleva adelante desde entonces gestiones ante el Gobierno Provincial para obtener el financiamiento para la construcción del edificio propio. 
Tras la firma del acuerdo, representantes de la Fundación EUPA agradecieron el acompañamiento y la confianza depositada por el Municipio, señalando que el espacio permitirá ampliar las actividades de formación y contención que la organización lleva adelante en la localidad. Lo propio hizo un nutrido grupo de padres que participaron del encuentro que se concretó en el despacho principal de la Municipalidad de Trevelin. «Temíamos que nuestros hijos no tuvieran este espacio tan necesario desde el próximo año, por suerte se pudo solucionar gracias a la decisión política asumida por el intendente Ingram con nuestra institución» dijo Gabriela Mansilla.