Horóscopo semanal por Mariángeles Palacios

Elemento Fuego (Aries, Leo y Sagitario)
Usarán todos sus encantos (que son muchos) para enamorar aún más a su pareja. Con la iluminación y magnetismo a flor de piel, será una excelente semana para concretar inversiones y realizar compras. El respaldo lunar les aporta impulso y claridad para resolver dilemas en cualquier área de la vida.

Elemento Tierra (Tauro, Virgo y Capricornio)
Venus respalda sus emociones y convierte el amor en su punto fuerte. Disfruten los encuentros sin pensar demasiado en el mañana. En el ámbito laboral y financiero, se avecinan novedades, propuestas y desafíos. El jueves será un día clave para avanzar con decisiones importantes.

Elemento Aire (Géminis, Libra y Acuario)
Su energía estará especialmente magnética y contagiosa, atrayendo personas afines en pensamientos y emociones.
El Sol favorecerá trámites y gestiones económicas, abriendo la puerta a propuestas interesantes hacia finales de semana.

Elemento Agua (Cáncer, Escorpio y Piscis)
Esta semana combinarán intuición, decisión y oportunidad con gran precisión. Mercurio respalda el movimiento y trae propuestas positivas a mediados de semana. Acepten sin dudar. Para equilibrar la energía, bajen la ansiedad con actividad física o caminatas al aire libre.

La perlita de la semana: Luna Llena en Aries
El 7 de octubre, el cielo nos regalará un espectáculo inusual: la superluna llena en Aries, la más brillante del año, que se verá hasta un 13% más luminosa de lo habitual.
Su energía nos invita a ser valientes, liberar viejos patrones y hacer realidad nuestros deseos. Cuando la Luna se muestra en su máximo esplendor, no solo ilumina la noche: también ilumina nuestras sombras.

Esta superluna da inicio a la temporada de superlunas en el signo del guerrero del zodíaco: Aries, el que no teme encender la chispa y tomar la iniciativa. Representa finales abruptos y nuevos comienzos cargados de poder y decisión.
Aries no pide permiso: Aries arrasa. Será una vibración cruda, visceral y directa, ideal para atreverse a cambiar el rumbo y avanzar sin miedo.