PORTADORA

Julia Perrone nació en Buenos Aires, pero desde los 10 meses de vida que vive en Trevelin. Es así que se considera una total chubutense. Estudió en La Plata, ciudad en donde se recibió de profesora y licenciada en artes plásticas.

Julia lleva toda una vida ligada al arte, la creación y las manualidades, y es la creadora de PORTADORA, una marca de marroquinería, con productos como mochilas, billeteras, estuches, riñoneras, que se realizan con materiales reciclados. “Hay todo tipo de cosas, todo lo que sirva y tiene utilidad, tratando de recuperar la estética de los materiales, y sus mayores características”.

Julia siempre tuvo una gran conexión con el arte: “Durante mi adolescencia hice de todo, velas, o portarretratos, por ejemplo, después comencé con pintura, grabado y dibujo”. Julia asegura que, desde chica, siempre le gustó poder crear algo que no existía.  

Sus comienzos con los materiales no convencionales fueron en su etapa de estudiante, viviendo en la ciudad de La Plata. “Como buena estudiante universitaria trabajaba mucho con basura, ya que el presupuesto siempre es limitado. Empecé a maravillarme con la posibilidad que tenían los materiales. Un día, dando vueltas en Pinterest, vi unas fotos de unos vasos, los mismos estaban hechos con bolsas de plástico recicladas y empecé a probar. Fue todo tomando forma de a poco” recuerda Julia.

 “Me maravillaba la metáfora que se escondía detrás de esto, que era un problema o un peligro, esto que todo el mundo tiraba, que era sucio, algo con lo que no sabías qué hacer, tenía todo este potencial. Puesto en el lugar indicado. Eso es lo que me encanta de trabajar con estos materiales”.

Al regresar a Trevelin, después de varios años en La Plata, Julia comenzó a trabajar de forma terapéutica y a crear. “Tejía canastos de cable, y no me acuerdo por qué volví a empezar con las bolsas, y eso fue tomando cada vez más fuerzas, hasta llegar a lo que es hoy, mi trabajo principal”.

“Mi material es la termo fusión de bolsas plásticas y ahora también los otros materiales similares que aparecen, como las piletas de natación, las carpas quemadas que ya no se pueden reparar, los gomones, los botes, todos estos materiales blandos, que no tienen vida de reciclaje, entonces no sabemos qué hacer con ellos y hay que tirarlos. Son increíbles porque son impermeables, duraderos, flexibles, livianos, tienen un montón de cualidades increíbles esperando ser aprovechadas.” asegura.

Julia confiesa que este emprendimiento es su gran pasión. “Además, me di cuenta que mi pasión también es la educación ambiental, la comunicación. Todo va de la mano”.

Con el tiempo, Julia participó también de varios festivales sustentables y trabajó en escuelas, siempre transmitiendo sobre la importancia de esta re utilización de objetos.

“PORTADORA trata no solamente de la educación ambiental, sino que también trato de que llegue a la mayor cantidad de personas posible esto de recuperar materiales que no tienen vida de reciclaje industrial y convertirlos en objetos de marroquinería”. De esta manera algo que era terapéutico, de a poco, se fue transformando en su trabajo y emprendimiento.

Para un futuro, Julia quiere crecer y poder darle trabajo fijo a un montón de personas. “Tengo muchas ganas de seguir con esto, sé que tiene potencial”. Y agrega “Esto es un mensaje que doy, no solo vendo un producto de marroquinería, sino que se da un mensaje una enseñanza, algo más. Quiero que la gente cuando vea mis productos, vea que las cosas que tiramos no son basura. A mí, me sirvió seguir el camino de mi pasión, jugarme a lo que me enamoraba, a los deseos que yo tenía. Creo que cuando hacemos las cosas desde el placer, y la pasión, tenemos mucha más energía y espalda para producir cosas grandes”.

@portadora.reciclaje

TREVELIN- CHUBUT