El paro se vivió con comercios abiertos, escuelas cerradas y sin transporte

Si bien el Sindicato de Empleados de Comercio (SEC) adhería a la medida de fuerza, tanto los comercios pequeños como las grandes superficies abrieron de manera normal, por lo que el centro presentó un movimiento bastante interesante. Lo que atenuó un poco la circulación por la ciudad fue el hecho de que las entidades bancarias sí permanecieron cerradas.
En cuando a la atención al público, las oficinas de la Municipalidad permanecieron abiertas en su gran mayoría, al igual que las estaciones de servicio y los taxis, que trabajaron con normalidad.
Un sector donde se sintió fuerte fue el del transporte, ya que no circuló ninguna de las seis líneas de colectivos de Puerto Madryn. En el caso de la Terminal, el panorama era casi desolador, con los micros de Mar y Valle y 28 de Julio estacionados en las plataformas, con los motores apagados y las puertas cerradas. Del mismo modo, la totalidad de las ventanillas de las empresas de transporte automotor estaban cerradas.
Dentro de la Terminal se dio un hecho curioso, ya que un micro que venía de realizar un tour de compras desde Buenos Aires, quedó varado en nuestra ciudad, más allá de que el destino final era la ciudad de Trelew, por lo que los pasajeros debieron esperar para recorrer los 60 kilómetros entre Madryn y la ciudad valletana. Allí, el coordinador intentaba dar con los referentes de la Unión Tranviaria Automotor (UTA) para ver si daban el visto bueno para que haga el último tramo del viaje.
Otro de los sectores donde la adhesión al paro fue casi total fue en Educación, ya que la enorme mayoría de los colegios decidió ni siquiera abrir sus puertas ante la adhesión de los docentes y los auxiliares de la educación. Salvo alguna excepción, las escuelas públicas no dictaron clases y, como suele suceder, las escuelas privadas sí dieron clases.