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La Escuela 53 de Trelew suspendió las clases presenciales debido a la rotura de una caldera

El miércoles pasado la Escuela 53 suspendió las clases presenciales debido a la falta de calefacción por la rotura de una caldera. Los padres y alumnos de primaria ayer a las 13 horas realizaron una protesta y firmaron dos petitorios que mañana entregarán a las autoridades provinciales de Educación y Obras Públicas exigiéndoles que solucionen el conflicto.

por REDACCIÓN CHUBUT 11/05/2021 - 00.00.hs

La escuela del barrio Comercio tiene una matrícula de 250 alumnos que concurrían a las aulas en burbujas siguiendo los protocolos del Covid-19. Las autoridades ahora están buscando una sede alternativa para que no pierdan la presencialidad.

 

La gestión del intendente Adrián Maderna, por intermedio del coordinador Héctor López, puso a disposición dos sedes vecinales para que los alumnos no pierdan clases presenciales hasta que se solucione el problema. Los directivos están evaluando si los espacios se ajustan a los protocolos vigentes. 

 

Previamente, hicieron sondeos para ver si podían trasladarse a una iglesia mormona ubicada en la calle Pellegrini y Capitán Murga, pero al parecer ya estaba reservada para otra escuela que también presenta problemas edilicios.

 

REEMPLAZAN LA CALDERA

 

En diálogo con Diario EL CHUBUT, la directora de la escuela, Andrea Pérez Ramírez confirmó que la cartera de Obras Públicas ya avanzó en una contratación directa para reemplazar la caldera y cambiar las cañerías, que están obsoltas. La directora dijo que desde el miércoles, cuando comenzó el problema, se puso en contacto con referentes de Supervisión y las carteras que conducen los ministros Florencia Perata (Educación) y Gustavo Aguilera (Obras Públicas), que avanzaron en una contratación directa para reemplazar la caldera en lo inmediato.

 

Asimismo, Pérez Ramírez convalidó que tuvieron acercamientos con el coordinador municipal Héctor López, quien les ofreció las instalaciones de las vecinales de los barrios Etchepare y San David, que manejan como posibles alternativas para continuar con la presencialidad.

 

La directora sostuvo que desde el mismo miércoles, cuando se averió la caldera, los alumnos de la escuela siguieron teniendo clases bajo la modalidad virtual. 

 

INCERTIDUMBRE

 

Por su parte, los padres y madres de los alumnos comentaron que la caldera se rompió hace dos años y desde entonces hicieron arreglos de coyuntura para seguir calefaccionando las aulas. Este año, después de un 2020 de pandemia sin presencialidad, se encontraron con que la caldera directamente estaba obsoleta. Según las madres, les dijeron que no podían colocar caloventores porque el sistema eléctrico no lo resiste, y les informaron que la obra de la caldera y las cañerías nuevas podría llegar a durar entre cuatro y seis meses.

 

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