Apareció en Río Negro vehículo robado en Trelew: Estaba pintado de otro color y lo usaron para un asalto

Al momento en que lo secuestraron en un control, andaba siendo manejado -según la policía rionegrina- por un ex presidiario de unos 50 años con antecedentes en robos a mano armada, del que no se supo si quedó preso o fue liberado. 

El vehículo es una camioneta Chevrolet Splint, patente AB-54-OP, cuyo color original era blanco pero había sido pintado de gris oscuro, a los efectos, seguramente, de despistar a quienes lo andaban buscando. 

El rodado fue detenido en las últimas horas en un control callejero que la policía realizaba en uno de los accesos a Choele Choel y lo terminaron incautando cuando se verificó a través de un sistema de información que manejan las policías de todo el país que había sido robado en jurisdicción de la comisaría Segunda el 24 de noviembre del año pasado de las inmediaciones de la estación de servicio «MICA», en el acceso norte de Trelew. 

A ese vehículo después de robarlo lo pintaron de otro color y lo utilizaron, aparentemente, en Río Negro; como medio de movilidad de unos ladrones que cometieron un asalto a mano armada. 

Ahora «la Splint» quedó secuestrada en una comisaría del lugar a disposición de la Justicia rionegrina, que seguramente investigará la vinculación del que la andaba manejando con el robo de la misma y el hecho que cometieron usándola para el asalto del que las autoridades omitieron brindar información. 

LA CONFUSION
A todo esto, el viernes a última hora había trascendido de fuentes extraoficiales que el vehículo incautado en Choele Choel era la camioneta robada el día anterior desde el exterior de un autoservicio chino de Trelew. Tal como fue informado por este diario. Pero en realidad era la Chevrolet Splint que también fue sustraída en esta ciudad, como ya se dijo, a fines del año pasado. 

A la Nissan 1,8, de color blanco, chapa patente AB908FT que se llevaron el jueves a la tarde del frente del mercado «Oriente», de A.P.Bell entre avenida Gales y Ecuador todavía no la encuentran y sus dueños están desesperados. La andan buscando por todos lados en la creencia de que el malviviente no pudo haber llegado muy lejos porque al momento en que la robaron tenía menos de medio tanque de combustible. 

Los propietarios, un matrimonio oriundo de Buenos Aires que hace poco está radicado en Trelew sostienen que el ladrón utilizó un «inhibidor» con el que habría evitado el accionar del cierre centralizado.  Para colmo en la guantera del vehiculo estaba la copia de la llave original que fue la que usó el delincuente para ponerla en marcha y llevársela en un hecho que estaría filmado por las cámaras de seguridad que están instaladas en el exterior «del chino».