Una diputada propone dictar clases de «educación emocional» en los jardines

De acuerdo recabado por ADNSur, el texto ingresado en la Legislatura remarca que la iniciativa se apoya en los principios establecidos por la Ley de Educación Nacional y la normativa provincial, que destacan la formación integral, la participación ciudadana y la construcción de valores desde los primeros años de vida.
El planteo parte de una premisa central: la primera infancia -desde el nacimiento hasta los 6 años- es una etapa clave en el desarrollo del cerebro y, por lo tanto, en la adquisición de habilidades que acompañarán a cada persona durante toda su vida. En los argumentos del proyecto, la diputada recuerda que organismos internacionales como la UNESCO sostienen que los niños que crecen en entornos seguros, estimulantes y afectivos tienen mayores posibilidades de desarrollar todo su potencial y convertirse en adultos capaces de participar plenamente en la vida social y económica.
Remarca que los vínculos tempranos con adultos y pares dejan huellas profundas en la constitución psíquica, moldean la identidad y permiten comprender el mundo que los rodea. En ese proceso, afirma, la educación emocional se vuelve una herramienta indispensable: «un proceso educativo, continuo y permanente», según la define Rafael Bisquerra, presidente de la Red Internacional de Educación Emocional y Bienestar. Su finalidad es fortalecer competencias como la empatía, el autocontrol, la expresión adecuada de sentimientos y la resolución de conflictos.
Otero señala que varias provincias ya avanzaron con legislaciones similares, entre ellas Corrientes, Misiones, Chaco, Tucumán y Jujuy, que incorporaron programas específicos de educación emocional o socioemocional en los niveles iniciales. En función de esa tendencia, considera necesario que Chubut dé un paso equivalente e incluya estos contenidos de forma «sistemática y transversal» en todo el Nivel Inicial.