Wisky aseguró que sumarán nuevas denuncias por fraude a obra social Seros

El presidente del Instituto de Seguridad Social y Seguros (ISSyS), Sergio Wisky, confirmó que se ampliará la denuncia penal original debido a la aparición de nuevos casos más graves. «Estamos juntando información porque tenemos casos más pesados, vamos a ampliar la denuncia original», declaró Wisky, señalando que la investigación continúa en curso.

Hasta el momento, existen denuncias penales contra seis profesionales, mientras que diez médicos ya fueron dados de baja por la obra social. «Nos fuimos ordenando y fuimos encontrando cosas», agregó el funcionario.

Entre los casos destacados, Wisky mencionó el caso de un médico que facturó por una prestación que una afiliada denunció que nunca recibió: un cateterismo cardíaco. «Un médico facturó una prestación que la afiliada había denunciado que no se la habían hecho, un cateterismo cardíaco, y lo denunciamos», explicó.

Otro caso involucra una irregularidad en la emisión de recetas electrónicas. Un afiliado que intentó retirar una medicación psicotrópica en una farmacia descubrió que nunca había recibido tal prescripción, lo que llevó a las autoridades a ampliar la investigación. «Estaba con una consulta que no la había hecho con un colega, y ese colega había hecho una receta a nombre de él. Así que empezamos a ver y había varias cosas más. Entonces ahí también metimos la denuncia», detalló Wisky.

Además, en Trelew, un médico traumatólogo firmaba prescripciones con un volumen inusualmente alto de solicitudes. Mientras que el promedio entre sus colegas era de 400 pedidos de imágenes, este profesional registraba 1.800 solicitudes. «A un clínico le encontramos muchos casos de facturaciones enormes y lo dimos de baja», añadió Wisky.

El presidente del ISSyS también denunció actitudes intimidatorias hacia los auditores del organismo, quienes fueron amenazados con la intervención de políticos en un intento por frenar la investigación. «También hubo actitudes intimidatorias con nuestros auditores, se amenazaba con llamar a algún político; es un sistema que venía podrido», concluyó.