Revocaron los mandatos de Juan Chaura y otros dirigentes de la conducción del SITRAVICH

El conflicto dentro de Sitravich se desató tras la denuncia de una trabajadora por presunta persecución laboral con connotaciones de género contra Camilo Neira, titular de la seccional de Puerto Madryn. La situación derivó en perjuicios económicos significativos para el sindicato, que ahora se ve obligado a enfrentar las consecuencias de una serie de decisiones cuestionables por parte de su conducción.
En primera instancia, la denuncia contra Neira había generado una investigación interna. La Dirección de Vialidad Provincial, en el marco de un sumario, suspendió a Neira debido a una causa por acoso sexual, la cual no prosperó. Sin embargo, la investigación avanzó en relación con acusaciones de acoso laboral, lo que llevó a una sentencia que encontró a Neira culpable de la misma. Pese a ello, Sitravich quedó atrapado en medio de la situación debido a la falta de acción por parte de la dirigencia encabezada por Carlos Milani y Juan Chaura. El asunto cobró mayor relevancia cuando, en septiembre, la actual conducción del sindicato convocó a una asamblea para designar un tribunal de ética sindical que se encargara de analizar las circunstancias que rodeaban a Neira en Puerto Madryn. Sin embargo, en paralelo, durante la gestión de Carlos Milani, el sindicato había actuado con premura, suspendiendo a Neira y buscando su remoción mientras la acción judicial seguía su curso.
El cambio de autoridades, con la asunción de Juan Chaura, trajo consigo un giro inesperado. A pesar de la gravedad de la situación, Chaura no tomó ninguna decisión sobre el futuro de Neira. Además, la conducción dejó pasar el plazo para apelar la sentencia, lo que terminó por hacerla firme.
Fue entonces cuando los compañeros que integraban el Tribunal de Ética Sindical realizaron un informe exhaustivo sobre el caso, poniendo el documento a disposición de la asamblea para que se evaluara el futuro de los responsables.
Aldo Griffiths, quien presidió la reciente asamblea, explicó a EL CHUBUT Digital que fue el Tribunal de Ética Sindical el que investigó el caso. Según Griffiths, tras detectar irregularidades, el tribunal recomendó la remoción de las autoridades gremiales implicadas. Como resultado, los afiliados reunidos en una asamblea extraordinaria decidieron, de manera unánime, destituir a Camilo Neira como secretario de la seccional de Puerto Madryn y a Juan Chaura como secretario general del sindicato.
. "La negligencia de no haber deslindado a Neira de su puesto a tiempo dejó al sindicato vulnerable y ahora deberá afrontar una demanda por no haber resuelto el problema adecuadamente", dijo Griffiths, responsabilizando a Chaura y Milani.
Además, se solicitó la destitución de Carlos Milani, quien había sido secretario general del gremio y actualmente ocupa un cargo en la Federación Argentina de Trabajadores Viales.
Griffiths destacó que “este tipo de conductas no pueden ser toleradas bajo ninguna circunstancia” y enfatizó la necesidad de restablecer la ética y transparencia dentro del gremio.
Con la remoción de las autoridades, el estatuto gremial establece que el secretario adjunto debe asumir de manera transitoria la conducción del sindicato hasta la realización de nuevas elecciones, previstas para marzo próximo. En este contexto, será Emanuel Ortega quien asuma el liderazgo del sindicato, tomando el cargo de manera provisional mientras se definen los próximos pasos.