Periódico español publicó el reencuentro del periodista Darío Santos con su familia en España

Dicen que la distancia es el olvido, pero, en este caso, nada más lejos de la realidad. Porque desde Playa Unión, en la ciudad de Rawson y la provincia del Chubut, en Argentina, hay un buen puñado de kilómetros y horas en avión hasta llegar a Bolaños de Campos, un pequeñito pueblo de 277 habitantes, según los datos del Instituto Nacional de Estadística actualizados este año 2021.

Darío Santos nació en Gaiman, provincia del Chubut aunque ahora se ubique en Playa Unión. Hace unos años, concretamente en el 2014, gracias a Rufino Callejo, del que les hablaremos más adelante, consiguió dar con la historia de su abuela Socorro Ramona Sampedro y completar el árbol genealógico de su familia.

Un árbol que se ubica en Bolaños de Campos. “Es mi lugar en el mundo” nos cuenta nuestro entrevistado, que cuenta los años para jubilarse y asentarse en la provincia de Valladolid.

“A mis familiares los encontré en el año 2014 a través de la página ‘Pueblos de España’. Ahí conseguí el contacto de Rufino Callejo de Paz, abogado, sacerdote, historiador, escritor, filósofo, profesor universitario y vecino de Bolaños de Campos”, asegura Darío en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León.

Fue en la localidad vallisoletana, donde encontró el lugar en el que nació su abuela: Socorro Ramona Sampedro y el pueblo “en el que comenzó a escribirse la historia familiar”. “Bolaños de Campos es mi lugar en el mundo y estoy enormemente agradecido a Rufino que fue la persona que me ayudó a encontrar a mi familia”, explica.

El primer encuentro con sus familiares en Bolaños se produjo en ese 2014, después de la finalización del Mundial de Baloncesto en Madrid. Tras estar en Sevilla junto a la Selección argentina, nuestro entrevistado se desplazó hasta Madrid y de ahí a la localidad vallisoletana para encontrarse con Rufino que le presentó a María Jesús Sampedro, familiar directo de su padre y a sus hijos: Roberto, Jesús y Sacra.

“Rufino me mostró todo el árbol genealógico de la familia Sampedro. Aún tengo por conocer a varios familiares más como, por ejemplo, a Lourdes, hermana de María Jesús, y a sus hijos: Óscar y Judith Sampedro Margallo”, asegura Darío que confiesa que el primer encuentro fue “maravilloso” y añade que “parece que se conocían de toda la vida”.

En mayo de 2015, nuestro entrevistado confiesa que pudo llevar a conocer a su padre, Pascual Carlos, hasta Bolaños de Campos con el fin de conocer a María Jesús y a sus hijos. “Fue el 30 de mayo, cuando se celebran las fiestas del pueblo. Lo pasamos muy bien”, añade. Por desgracia, en el año 2019 falleció su padre. “Todos los años volvemos al pueblo con mi esposa y algunas veces con mi hijo Salvador y con mi madre: Zulma. Hemos afianzado los vínculos con Roberto Baza Sampedro y su esposa: Sonia Alcalá Fernández. También con sus hijos Robertito y Daniel”, nos explica.

En el Tribunal Superior de Justicia de día y periodista de noche

Darío tiene ahora 60 años. Trabaja en el Tribunal Superior de Justicia desde el 15 de abril del año 1982 y como periodista deportivo desde el año 1983, tanto en radio como en televisión. Está casado con Susana y tiene un solo hijo: Salvador Carlos Darío, del primer matrimonio de 29 años. Es ingeniero civil y trabaja en una empresa valenciana en Alemania.

“Mi vida ahora, en Argentina, se basa en trabajar por la mañana en el Tribunal Superior de Justicia y por la tarde y los fines de semana narro partidos de fútbol en una emisora de radio. Voy a cumplir 40 años como periodista deportivo y en la actualidad ocupo la presidencia del Círculo de Periodistas Deportivos del Chubut y soy vicepresidente de la Federación Argentina de Periodistas Deportivos (FAPED)”, nos cuenta este amante del deporte.

Su pasión es narrar partidos de fútbol y estar en los grandes eventos deportivos. Estuvo en el Mundial de Fútbol de México 86, en el de Estados Unidos de 1994 y ha llegado a cubrir el Gran Premio de Fórmula 1 de Mónaco, boxeo con veladas y combates entre Canelo Álvarez y Julio César Chávez, en Las Vegas y el ya citado Mundial de Baloncesto de España 2014.

Jubilación y una vida futura en Bolaños de Campos

“Me quedan 19 meses para jubilarme. Cuando eso ocurra quiero instalarme en España ya que tengo la nacionalidad conseguida a través de la Ley de Nietos en el año 2012”, asegura Darío que cuenta los días para llegar a nuestro país en general y para instalarse en la provincia de Valladolid en particular.

Y es que Bolaños de Campos es “su lugar en el mundo”. Quiere llegar al municipio pucelano e instalarse allí “como homenaje a su abuela Socorro” y apunta además que “hará todo lo posible para que el pueblo no siga perdiendo habitantes”.

“En el año 1910, Bolaños de Campos tenía 908 habitantes y en estos momentos no supera los 300. Ha sido duro para mí saber que ya no está la Casa Rural, el Mercado de Dioni y el Bar Palacio, tres lugares que visité en mi primer viaje en el año 2014, pero quiere volver cuanto antes”, finaliza.

Un locutor de radio argentino que dio con su familia perdida en este bello pueblo pucelano en el que quiere asentarse cuando se jubile.