Fin de Semana

El día que Chile nacionalizó el cobre

Por Adolfo Pérez Mesas (adopem@yahoo.com.ar)

por Por Adolfo Pérez Mesas 17/07/2021 - 11.49.hs

No voy a hablar sobre estadísticas, ni toneladas de producción, a 50 años de este hecho histórico. Voy a destacar, al igual que las generaciones de los años ‘70, la reacción de un pueblo, resumida en su discurso del mandatario socialista en la Plaza de Los Héroes en Rancagua, el mismo día que se aprobó la recuperación de la gran minería. Es que Allende, todavía no transcurría un año de su mandato y cumplía con una vieja aspiración del pueblo chileno, recuperar la riqueza de su suelo, capaz de transformar la vida de su gente. Calificó ese acontecimiento histórico, como el "Día de la Dignidad y la Solidaridad Nacional".

 

El pueblo, ese día, salió a la calle a respaldar tremenda y valiente decisión en recuperar lo que se denominó "el sueldo de Chile", hubo actos populares en las plazas y las poblaciones (barrios) sacaron sus banderas en reconocimiento a esta decisión.

 

 

No fue fácil, hacerse cargo de una industria que ya contaba con tecnología de avanzada. Los ingenieros, técnicos y trabajadores en general, tomaron en sus manos tamaña responsabilidad, porque la nacionalización requirió el inmediato retiro de los ingenieros norteamericanos, quienes se llevaron los planos y manuales de las maquinarias.

 

 Paulatinamente, los nuevos dueños del cobre chileno fueron solucionando las dificultades entre ellas, la baja producción, que a los par de meses alcanzaba el promedio y superaba hasta donde lo habían dejado los antiguos dueños del mineral.

 

 

 

El estado chileno indemnizó a las compañías norteamericanas, restándole las utilidades excesivas que obtuvieron durante los años anteriores, debido a que pagaban bajos impuestos. Con este sistema de indemnización, las empresas Anaconda y Kennecott terminaron debiéndole al Estado chileno cifras millonarias, dado que sus utilidades fueron realmente excesivas en ese periodo de vacíos en la ley.

 

 

Pasaron 50 años de este hecho histórico y dos años después vino el golpe militar comandado por Augusto Pinochet, el 11 de septiembre de 1973. Entonces, el gobierno de facto inició posteriormente la "desnacionalización" de la Gran Minería y paulatinamente lo que se había denominado el sueldo de Chile, pasó a manos privadas y el estado solo mantiene un bajo porcentaje de esta gran riqueza, donde se habla que el 10% de los ingresos son solventar armamento y equipamiento para el ejército de Chile. Actualmente, ningún gobierno democrático en el país trasandino, se ha atrevido a pisarle la cola al diablo.

 

¿Querés recibir notificaciones de alertas?