Se fue a tatuar y terminó apuñalado

Cuando lo apresen deberían imputarle ser el autor de «un robo agravado por el uso de un arma blanca» y las lesiones al cliente de su ex mujer. Para llevarse el rodado de la víctima tuvo que cortarle una cadena y violentar el candado con los que estaba asegurado al pilar de la luz. 
El violento hecho se produjo cerca de las 23 de este lunes en un domicilio de la calle Cholila al 700 en el barrio INTA y cuando llegó la policía -convocada por la dueña de casa, quien llamó al 101 denunciando que en su vivienda había una persona apuñalada, se encontró con que la víctima se había escondido en el domicilio aledaño, en el del vecino, por miedo a que el atacante regresara, según dicen que les manifestó a las autoridades.  
La víctima, de unos 30 años, se había hecho un torniquete porque su pierna sangraba muchísimo y entonces la policía llamó enseguida a la ambulancia, en la que terminó siendo trasladado al hospital. Hasta ayer no había información de cómo evolucionaba su lesión pero en fuentes policías decían que aparentemente era de carácter leve. 
El sindicado tendría casi la misma edad que la víctima, serían conocidos, y hasta las últimas horas se desconocía su paradero. Era muy factible que fueran a allanarle la vivienda y que si se encontrara en el lugar terminaran llevándoselo detenido, por la concurrencia de graves delitos que le imputan. 
En el lugar del hecho, las autoridades intervinientes secuestraron -según pudo conocer este diario- «la hoja del cuchillo utilizado para la agresión que se encontraba sobre un sofá cama del living» y se tomaron muestras fotográficas de las manchas de sangre que había sobre todo en el acceso a la vivienda de la tatuadora.