Falleció Lorenzo Soriano

Falleció ayer, a los 90 años, Lorenzo Soriano, un empresario, que vió en la producción de algas un recurso natural de la provincia para la exportación.

Procedente de Buenos Aires cuando aún era estudiante de Química, se radicó en 1954 en Gaiman.

En su última nota brindada a El Zonal del Valle Suplemento de EL CHUBUT, precisamente cuando festejó su último cumpleaños y al recordar tiempo pasados, comentó que cuando vino por primera vez al sur «me dije no me voy mas de aquí», y agregó que siempre pensó que «Dios me regaló la Patagonia», por la belleza, tranquilidad y la inmensa riqueza que tiene la patagonia, no solo en su tierra, sino también en el mar.

La última etapa de su vida lo pasó junto a su mujer Stella Maris Grau, sus hijos, y siempre con el anhelo de llevar a la realidad ideas que brinden progreso y trabajo. Su persistente voluntad y esfuerzo fueron notorios méritos para hacerlo acreedor a reconocimientos sociales, políticos y empresariales de gran relevancia.

«Tingo» Soriano fué ministro de la Producción durante el gobierno de Carlos Maestro, ideando las leyes de promociones industriales, Promoción de Puertos Patagónicos y el Polo Textil Lanero. Fue asimismo director del Banco del Chubut, fundador de la Unión Industrial Argentina (UIA) sede Chubut, siendo actual vicepresidente de la UIA Patagónica. Como apasionado jugador fue uno de los «top five» del tenis nacional y socio aún del Lawn Tennis Club de Buenos Aires. «Tengo más títulos que el diablo», nos dijo en un reportaje que efectuamos el año pasado en su domicilio.

LA ERA BAHIA BUSTAMANTE

El empresario llegó a la zona en 1953 buscando algas marinas para poder extraer una materia denominada «coloide» que le permita continuar con la fabricación de Malvik, fijador para cabello, actividad que comenzó en 1947 con su padre.

Luego de recorrer la costa patagónica en busca de algas marinas, descubre Bahía Bustamante, conocida en la zona como Bahía Podrida, debido a la acumulación de algas marinas en estado de putrefacción. Allí realiza el primer relevamiento y luego, junto a sus hijos, comienza la recolección de algas marinas, dando origen a este exclusivo pueblo alguero.

En un principio, sólo había dos construcciones frente al mar. Allí se instalan y empiezan a construir lo que hoy es Bahía Bustamante, erigiendo casas y habitaciones para más de 400 empleados, escuela, iglesia, comisaría, depósitos, talleres y una proveeduría, entre otras instalaciones.

LAS ALGAS MARINAS

«Tuve la suerte de encontrar un lugar ideal para mi forma de pensar, que era un terreno junto al río -nos decía en el reportaje- nosotros necesitamos estar a orilla de un río para la cantidad enorme de agua que consume la industria de las algas marinas. Encontré en Gaiman esa fábrica antigua, que era de Quesos Chubut, era el 15% de lo que es hoy».

En el ’55 la familia Lorenzo concreta el primer producto de algas marinas, aunque la planta que ocupa el predio de hoy junto al río Chubut, en el puente de Gaiman, se inauguró en febrero del ’67, primera etapa. Allí se producen gelatinas que se utilizan para elaborar dulce de batata, insumos para flanes y muchos productos para la industria alimentaria y cosmética, como cremas, geles de algas marinas.