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Ciclista unió la Cordillera con Playa Unión tras recorrer toda la Ruta 12 de la Meseta

El pasado 10 de enero, un grupo de ciclistas inició la travesía de cicloturismo «De los Andes al Mar por la Meseta de Chubut»: un desafío de pedalear 843 kilómetros, entre Cholila y Playa Unión, siendo el recorrido mayor el desarrollado en la Ruta Provincial Nº 12. De ese grupo, sólo uno pudo llegar a destino el último jueves.

por REDACCIÓN CHUBUT 19/02/2022 - 00.00.hs

El que llegó fue Jorge Castro, profesor de Educación Física, creador de este proyecto junto a su esposa, Mariela Cabral, también profesora. Del primer trayecto, en pleno enero, participaron siete ciclistas y el mismo fue impecable y de acuerdo a los tiempos que se trazaron. Pero cuando llegaron a Paso de Indios atravesaron el temporal de lluvia, y posteriormente la caída de Mariela en una bajada a 10 kilómetros de Paso de Indios, camino a Los Altares. Allí, el 21 de enero, Mariela se cayó de la bici mientras iba pedaleando, producto de unas ráfagas de 65 kilómetros por hora que soplaban en ese momento. Esto generó extensión del plazo que tenían para cumplimentar con su recorrido.
Y descubrieron que en su proyecto, no tuvieron en cuenta al viento. Por lo cual, Jorge siguió solo y completó recorrido en las últimas horas. Este fin de semana se vuelve a Cholila, donde está radicado. La travesía, que en total duró un mes y ocho días, le ha dejado un balance positivo y con ganas de volver a hacerla el año que viene.
Antes de volver, primero a Paso de Indios a buscar su auto y de ahí seguirá rumbo a Cholila, llegó hasta EL CHUBUT para compartir esta experiencia y destacar una actividad sana, ecológica, económica como es el uso de la bicicleta y el cicloturismo.
Salieron de Cholila y si bien la idea era disfrutar del Parque Nacional Los Alerces en su esplendor, por los inconvenientes y manifestaciones dentro del mismo, además de que el Parque estaba cerrado, tomaron otro rumbo: Leleque. Desde allí comenzaron un recorrido por la Ruta 40 y luego tomaron la Ruta 12: hicieron Gualjaina, Piedra Parada, Paso del Sapo y Cerro Cóndor. 
La travesía la iniciaron siete personas, entre ellos, los ciclistas Abelino Vargas y Sandro Escobar de Paso de Indios, y ciclistas de El Bolsón. Todos se volvieron antes por cuestiones laborales y desde Paso de Indios hasta Playa Unión, seguirían en viaje Jorge y Mariela. La caída de Mariela generó que Jorge siguiera solo pedaleando y completó recorrido en Los Altares, Las Plumas, Dique Ameghino, donde llegó justo para la Fiesta de la Energía, Dolavon, Gaiman, Trelew, Rawson y Playa Unión. En estas latitudes, se alojó en la casa de su amiga Marcia Sastre de Paso de Indios.
A su esposa «luego del accidente la tuvimos que llevar a El Bolsón. De ahí me volví en auto hasta Paso de Indios para retornar la travesía, ya que mi esposa quería que la termine».
La Ruta 12 «no es fácil. Hay que estar bien físicamente para hacerla. La idea es poner en valor este corredor. No teníamos información sobre cicloturismo, no había nadie que lo haya recorrido entero. Nosotros hacemos un recorrido distinto porque nos detenemos mucho, hablamos con la gente, nos enteramos sobre los atractivos, la cultura de la Meseta», indicó.
El viaje «hasta Paso de Indios tuvo una etapa. Llegamos a Paso de Indios y nos traicionó el viento, algo que no teníamos previsto, mi esposa tuvo un accidente con lesiones leves, por ser que fue una caída fuerte. El casco se le rompió. Yo iba atrás y sabía que se iba a caer».
En Los Altares «estaba esperanzado con bañarme en el río, pero justo en esta época está bajo». El trayecto en soledad «fue más rápido que en grupo» porque «se va charlando y parando, yendo solo es distinto». Una vez que pasó Las Plumas «paré en un lugar llamado Lagunas Grandes, con la familia de Luis Bowmann» quienes le permitieron acampar. Posteriormente «seguí al Dique donde me recibió el jefe comunal, Raúl de Domingo, y una amiga docente, Gloria Galván, ya jubilada. Yo hacía 30 años que no pasaba por el Dique y me encontré con un lugar muy lindo».
Finalmente pasó por Dolavon, se reunió con el profesor Quique Sosa; y en Gaiman se reunió con otro docente amigo, Arturo Lizama. De Gaiman a Playa efectuó «unos pocos kilómetros», dijo, que los finalizó el último jueves.

 

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