Un peronismo disgregado busca reagruparse para constituir proyecto sólido para octubre

El resultado de las PASO agrietó disputas añejas en el PJ, direccionadas sobre todo a la capacidad de manejo político de quienes están al frente de la estructura partidaria en Chubut. Internas que desgastan, discusiones mediáticas estériles que solo exponen malestar sin mayor sentido; y no se resuelven, sin antes ofrecer los espacios internos necesarios para tal fin. 

El tercer e inesperado lugar en las primarias del 13 de agosto, generó un profundo malestar hacia adentro del peronismo. Y no demoraron los reproches. Incluso hasta los consejos de localidad se suponen capaces de emplear la energía suficiente para cargar con una campaña presidencial, que convenza al electorado y posibilite revertir un resultado que se supone complejo. 

Transcurre el tiempo, y lejos de iniciar las discusiones internas pertinentes para encauzar a la masa partidaria, los exponentes del PJ prefieren exclamar su enojo. Tampoco la dirigencia promueve un debate inmediato para calmar la verborragia de aquellos que no se sienten amparados bajo el escudo peronista.

El primer turno electoral encendió los ánimos. Y obligó a renuncias y a pedidos de autocrítica, con el único propósito de alentar la participación y proponer al ciudadano un espacio confiable, capaz de interpretar la demanda civil y actuar en consecuencia. 

Contabilizados los votos, emergió la decepción. Seguidamente se conoció la renuncia de la vicepresidenta del PJ, Ana Amato, quien no ocultó malestar por lo arrojado por las urnas. Pidió al peronismo «autocrítica», como ya lo hicieron otros dirigentes.

También el presidente del Congreso peronista, José Salvador Arrechea, cuestionó la «falta de líderes» en algunas latitudes de la provincia, que facilitaron al resto de las fuerzas electorales superar al PJ en los comicios. 

Para el experimentado dirigente «el problema del Partido Justicialista en Chubut es el Valle»; y asumió que el sector atraviesa momentos complicados. Dijo que esta región de la provincia «no fue atendida por el esquema político» y por ello el resultados de los últimos comicios. 

Graficó que en el Valle el PJ perdió por más de 15 mil votos, mientras que en el resto de las localidades la diferencia no fue tan amplia. Además, exigió que «tenemos que cambiar la estructura del partido» y que se termine «el dedo de Buenos Aires». 

Referenció que el gobernador electo, Ignacio «Nacho» Torres, «con menos estructura que nosotros dio la idea de que tenía un proyecto provincial y nosotros somos una sumatoria de proyectos municipales». 

CRITICAS MADRYNENSES

El dirigente peronista de Puerto Madryn, Miguel «Coné» Díaz, por su parte, cuestionó directamente al presidente del Partido Justicialista, Carlos Linares, al interpretar que «le entregó la jefatura política del peronismo (al gobernador) Mariano Arcioni». (Ver sección Puerto Madryn).      

Reconoció también que «tenemos un panorama muy negro, y estamos muy disgregados». Apuntó que a raíz de ello en otros lugares de la provincia «se están autoconvocando, lo cual me parece muy loable, pero quien tiene que hacerlo es la cabeza del partido». Precisó que «falta (tiempo) para la reunión que convocaron producto de la renuncia de la vicepresidenta del partido, Ana Amato».

Agregó que desde hace «ocho derrotas que no asoma la autocrítica que exige» la militancia. 

ORGANIZACION

Con relación a lo expuesto por Díaz, el fin de semana se reunieron en Trelew militantes peronistas para solicitar la conformación de una Mesa Política, con el propósito de conducir desde el Consejo de Localidad la campaña presidencial de Sergio Massa. 

La intención es unificar criterios, con la mente puesta en las elecciones generales del 22 de octubre. 

Atento el resultado de las PASO, «surge la necesidad de generar este espacio, en donde entendemos, que es para unificar criterios de acción» con la finalidad de «diagramar los lineamientos de trabajo y organización de la campaña electoral». 

«Entendemos que se debe hacer un esfuerzo militante, porque lo que está en juego es la Patria, y defenderla es nuestra responsabilidad», escribieron los militantes peronistas de Trelew.