Librería Avenida con los mejores juguetes nacionales e importados de calidad y precio

Al recorrer el establecimiento ubicado en Avenida Yrigoyen 2342, rodeado por un mundo de juguetes y artículos para el esparcimiento, pudimos apreciar cada artículo importado y nacionales de primeras marcas, que como siempre Librería Avenida a sabido ofrecer a sus clientes. Cada local que Raúl Mancinelli activó para la vida comercial, tiene su historia y desde aquel lejano 1963 a la fecha, «son varias las generaciones que han pasado por nuestros locales y eso nos llena de alegría», dijo EL CHUBUT mientras caminábamos entre las góndolas y exhibidores de juguetes que para esta navidad y reyes, ofrece para Trelew y la zona, para hacer felices a las familias que buscan el mejor regalo para sus retoños.

LOS FRUTOS DEL TRABAJO
Todo comenzó cuando en 1975, el padre de Raúl, tuvo un accidente y fue necesario incorporarse al manejo del negocio. «Mis padres me pidieron que dejara de trabajar en el Banco Italia Río de La Plata, que funcionaba en la calle Belgrano, en ese tiempo era un empleado con proyección, entonces me incorporé al proyecto comercial de mi familia». En esta historia comercial, dijo Raúl, «tuvimos altibajos y luego de vender la propiedad donde nació este emprendimiento, muchas veces tuve que recurrir a créditos hipotecarios, ayuda del banco, hoy eso es algo imposible, y así pudimos instalar cuatro locales en Trelew y uno en Puerto Madryn». Todo este grupo de librerías, juguetería y armería, es atendido por su esposa Marita, sus hijos Marcelo y Sergio el contador. «Además, nueve empleadas a quienes destaco por su fidelidad porque han estado en las buenas y en las malas», y recordó que sus comienzos fueron en momentos difíciles «a mí me tocó el rodrigazo en 1975, en el 2001 también estuvimos muy complicados, pero siempre salimos adelante, todo se hizo a fuerza de horas de trabajo, ahí está el secreto para superar las adversidades económicas, hoy estoy jubilado pero con mi jubilación aspenas me alcanza para pagar una mutual y una pastilla, sin embargo, sigo trabajando», finalizó diciendo el comerciante que desde muy joven dedicó su vida al mundo de los juguetes.