El Concejo extenderá las sesiones hasta el 23 de diciembre, donde se aprobará el Presupuesto

«La fecha surgió de manera espontánea. Lo consensuamos y quedó definida», dijo un legislador. «No se pensó en la posibilidad del 18», agregó.  Durante esa sesión, previo a la Nochebuena, los ediles avanzarán sobre el Presupuesto 2026 calculado en más de 97 mil millones de pesos. El paquete de gastos e ingresos prevé la eliminación de 55 cargos políticos, descuento en Ingresos Brutos para comerciantes e inversión en obras públicas.  

El proyecto de Presupuesto ingresó con demoras al Concejo Deliberante. Debía remitirse a fines de octubre, sin embargo, el Ejecutivo solicitó una prórroga para su presentación. Fue enviado junto con la Tarifaria Fiscal 2026; esta fue aprobada hace algunas semanas. 

Antes de ser elevado el proyecto de Presupuesto al Concejo, el intendente Gerardo Merino había señalado que «ordenamos lo urgente; con un gran esfuerzo económico y el aporte de los contribuyentes». Lo calculado «será administrado con compromiso y austeridad, cuidaremos cada peso público y será destinado donde realmente haga falta».

Al parecer, no habría problemas con la aprobación del expediente después de exhaustivos análisis por parte de los concejales. De todos modos, la sesión sería extensa, ya que existen otros temas en carpeta. 
Los concejales buscarán además tratar en el recinto la ordenanza del uso de suelo y la adhesión al Código Electoral Provincial.

UN PROYECTO DISCUTIDO
Otro de los temas, que generó polémica y buscará su salida del legislativo, es la creación del Registro Público Municipal de Inmuebles Baldíos, Inmuebles con Edificación Derruida o con Edificación Paralizada, cuya autoría corresponde a la presidenta del bloque de Juntos por el Cambio, Claudia Solís. 

El proyecto, que contiene más de una decena de artículos, habilita al Municipio a expropiar o declarar de utilidad pública aquellos inmuebles cuyos propietarios no avancen con la edificación de las estructuras o declaren su tenencia. 

La iniciativa de Solís, que aseguró fue diagramada también con distintas áreas de la Municipalidad, despertó distintas reacciones en la comunidad. De hecho, hace pocos días ingresó una nota al Concejo, firmada por la vecina Luisa Beatriz Farb, solicitando se la excluya de ese registro municipal, en virtud de que habita en el inmueble declarado como abandonado. Y que, como reviste una jubilación, le es complejo concretar mejoras en la estructura.   

La iniciativa, parece, no tendría el acompañamiento requerido para su aprobación, en virtud de que existirían algunos grises que ameritan un estudio más sólido. Otros plantearon asuntos jurídicos y constitucionales que podrían ir en detrimento del propio proyecto. Y dificultarían su tratamiento. 

Si bien el texto fue modificado en algunos aspectos, no sería suficiente para reunir el consenso necesario que permitiría su sanción. Habrá que esperar qué sucede estas semanas para conocer si suceden cambios con relación a la empatía del proyecto.