Groenlandia no explota su uranio debido a riesgos para la salud I
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En diciembre de 2021, el gobierno de Groenlandia implementó una ley que prohíbe la investigación preliminar, exploración y explotación de uranio. Esta prohibición también afecta a la minería de otros minerales si el contenido de uranio en el recurso excede un umbral de 100 gramos por tonelada de mineral.
Esta decisión fue en gran parte impulsada por la oposición pública a proyectos mineros que involucraban uranio, como el de Kvanefjeld, que es rico en tierras raras, pero también contiene uranio y torio. La prohibición ha frenado efectivamente estos proyectos, y no hay minas de uranio activas en Groenlandia en este momento.
Gordon Edwards presidente y cofundador de la organización sin fines de lucro Coalición Canadiense para la Responsabilidad Nuclear, nació y creció en Toronto, graduado con medalla de oro en Matemáticas y Física en la universidad de su ciudad.
Gordon nos cuenta que participó en un foro sobre la explotación de uranio que se realizó en Narsaq, en el sur de Groenlandia, el 11 de junio de 2016. Asistieron muchos parlamentarios y representantes de ayuntamientos. También participaron muchas personas locales.
Estuvieron presentes el Dr. Bill Williams de Australia, una elocuente y joven mujer inuit del Lago Baker, en Nunavut llamada Hilu, y Jack Hicks, quien tiene décadas de experiencia profesional en Nunavut y se ha involucrado con los problemas que ha habido allí con el Uranio.
Sara Olsvig, la líder del partido político Inuit Ataqatigiit de Groenlandia, le pidió a Médicos por la Supervivencia Global (Physicians for Global Survival) de Canadá, que enviaran un vocero para determinar los riesgos de salud relacionados con la explotación del uranio. “Fui elegido por el comité para representarlos en la conferencia de Groenlandia” nos dice Gordon.
El bonito pueblito de Narsaq, en el sur de Groenlandia, que tiene una población de cerca de 1.500 personas, está a sólo 7 kilómetros de donde estaría la mina. Esta mina se llama Kvanefjeld en danés y Kuannersuit en groenlandés.
El yacimiento de mineral en cuestión es muy complejo geológicamente, ya que contiene uranio, zinc y “tierras raras”. Se estima que hay mil millones de toneladas de minerales, y que, después de ser procesados, dejarían un rastro de casi mil millones de toneladas de residuos con un bajo nivel de radioactividad, en forma de arenas residuales y otros tipos de deshechos.
Este lugar se considera el segundo depósito de óxidos de tierras raras más grande del mundo excluyendo a China. China dominó el mercado de las tierras raras hasta hace pocos años, cuando anunciaron que reducirían la exportación progresivamente, debido principalmente a la preocupación por el medioambiente. Esto ha causado que las exploraciones para buscar yacimientos de tierras raras hayan aumentado en otras partes del mundo.
En próxima nota reproduciremos el Informe del científico Gordon Edwards con motivo de su participación en el foro sobre la explotación de uranio de Narsaq.
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