Carta del Lector

Contaminación por plástico, un gran mal de nuestro tiempo II (continuación)

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El Programa de la ONU para el Medio Ambiente (PNUMA), promueve negociaciones para resolver este problema, pero advierte que si no hay cambios en el consumo mundial de plástico podría triplicarse para 2060, y se espera que la producción de residuos plásticos en la naturaleza aumente un 50 % para 2040.

Las negociaciones se llevan a cabo sobre la base de un borrador que al inicio de la actual ronda presentaba todavía hasta 300 puntos sin consensuar entre los Estados.

 

Las trabas de los países petroleros

 

Varios países petroleros que rechazan cualquier restricción sobre la producción de plástico están bloqueando los esfuerzos en Ginebra para alcanzar el primer tratado mundial, indicaron a AFP varias fuentes implicadas en las negociaciones.

 

Plásticos acumulados en la Cinta Costera, en la bahía de Ciudad de Panamá. Foto: EFE

"Es un diálogo de sordos, con muy pocas pistas para aterrizar", dijo una fuente diplomática de un país de la coalición llamada "ambiciosa", que quiere imponer en el texto final objetivos de reducción de la producción de plástico virgen (no reciclado).

 

El proyecto de tratado, el primero sobre esta cuestión legalmente vinculante, busca regular a nivel mundial la producción, el consumo y el fin de vida del plástico.

 

Las últimas negociaciones fueron un fracaso. Tuvieron lugar a finales de 2024 en Busan, Corea del Sur.

 

"Las posiciones se cristalizan", confirmó una fuente de una ONG que asistió a varias sesiones a puerta cerrada.

 

Los documentos presentados por las delegaciones muestran que Arabia Saudita, los países árabes, Rusia e Irán, que dicen "compartir las mismas ideas" en un grupo llamado "like minded", rechazan cualquier medida vinculante sobre la producción de plástico.

 

Estos países quieren que el tratado no incluya el origen petrolífero del plástico, sino que se centre únicamente en la fase final, cuando se convierte en residuo, con medidas como la financiación de la recogida, la clasificación y el reciclaje, especialmente en países en desarrollo.

 

Sin embargo el texto inicial para lanzar las negociaciones abarca "todo el ciclo de vida" del plástico.

 

Pulseada en Ginebra

 

Según la fuente diplomática, si el texto solo sirve para ayudar a que los países en desarrollo gestionen mejor sus residuos, "no necesitamos un tratado internacional". "Estamos ante una pulseada con países dispuestos a que no haya tratado", asegura.

 

Residuos plásticos en una playa en Panamá. Foto: EFE

Tampoco hay consenso sobre el artículo 3 del futuro tratado que establece una lista de sustancias químicas consideradas potencialmente peligrosas para el medio ambiente o la salud humana como aditivos, colorantes, contaminantes llamados "eternos" (PFAS) o ftalatos.

 

"Algunos no quieren ninguna lista, o que cada país pueda hacer su propia lista de productos peligrosos, lo que ya se puede hacer sin necesidad de un tratado internacional", señala la misma fuente, que además se muestra sorprendida "por la falta de apertura de China"; un país que, mientras contamina, levanta las banderas de las energías renovables y hace de los paneles solares un negocio espectacular. (Fuente Redacción Clarín Con información de EFE y AFP).

 

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