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En las últimas tres décadas aumentó un 35% el diagnóstico de la leucemia más frecuente en hombres

Entre 1990 y 2019 las tasas de incidencia de leucemia mieloide aguda (LMA) aumentaron a nivel mundial un 35% en hombres y un 8% en mujeres, según un estudio publicado recientemente que analizó registros globales de esta enfermedad que representa alrededor del 80% de los casos de leucemia en adultos y de la que mañana se conmemora el día mundial.

por REDACCIÓN CHUBUT 20/04/2022 - 13.48.hs

El trabajo, que se presentó en la última Conferencia de la Red Nacional e Integral sobre Cáncer de Estados Unidos (NCCN 2022), indicó que en este período de tiempo también se incrementó la mortalidad (casi un 12% en hombres y un 1,5% en mujeres), pero el índice de mortalidad sobre incidencia (MII) disminuyó tanto a nivel mundial como en todas las regiones.

"Aunque el MII está mejorando a nivel mundial y en todas las regiones del mundo, la carga de la enfermedad en constante aumento es preocupante", concluyó el trabajo.

La LMA es la leucemia aguda más común en adultos y representa alrededor del 80% de los casos de leucemia en adultos; mientras que en niñas y niños menores de 10 años significa menos del 10%.

"El estudio no determina a qué se debe este incremento, es muy probable que al mejorar los registros epidemiológicos y llegar antes al diagnóstico sea esto lo que incrementa los casos", indicó a Télam Fernando Piotrowski, director ejecutivo de ALMA (Asociación Leucemia Mieloide Argentina).

Las leucemias son cánceres que se originan en las células que normalmente madurarían hacia los diferentes tipos de células sanguíneas; suelen originarse en formas tempranas de glóbulos blancos, pero algunas comienzan en otros tipos de células sanguíneas.

Las leucemias se clasifican en agudas (crecimiento rápido) o crónicas (crecimiento más lento) y si se inician en células mieloides o linfoides.

La LMA se inicia en la médula ósea (la parte blanda del interior de ciertos huesos donde se producen las nuevas células sanguíneas), pero suele pasar rápidamente a la sangre y a veces se propaga a los ganglios linfáticos, el hígado, el bazo, el sistema nervioso central (el cerebro y la médula espinal) y los testículos.

En un estadio temprano la enfermedad presenta síntomas inespecíficos como falta de aire, aparición de moretones, fiebre, debilidad y propensión a infecciones, lo que dificulta su diagnóstico.

"En el caso de esta leucemia, por cómo se desarrolla, no existen estudios útiles para descubrirla en estadios tempranos, entonces la mejor manera de encontrarla es no demorando la visita médica ante alguno de estos síntomas que llame la atención", dijo por su parte María Marta Rivas, médica hematóloga y jefa del Servicio de Hematología del Hospital Universitario Austral.

Para el diagnóstico se realiza primero un hemograma completo y si hay sospecha se indica una punción de médula ósea.

Piotrowski enfatizó que "tras el diagnóstico, el tratamiento debe iniciarse idealmente dentro de los pocos días posteriores", pero advirtió que "los tiempos del Estado, de las obras sociales y de las prepagas muchas veces se miden en semanas, un tiempo que el paciente no tiene para esperar porque particularmente en este tipo de leucemia cada día es crucial".

Según la Sociedad Americana de Cáncer, la quimioterapia es el tratamiento principal para la mayoría de los tipos de AML, algunas veces junto con un medicamento de terapia dirigida.

"A este tratamiento le puede seguir un trasplante de células madre", en tanto que "la cirugía y la radioterapia no son tratamientos principales para la AML, pero pueden utilizarse en circunstancias especiales", explicaron.

En tanto, desde ALMA informaron que "las terapias que potencialmente curan esta enfermedad son la quimioterapia intensiva y el trasplante de médula ósea, aunque las tasas de curación son más bajas que en otras enfermedades oncológicas y oncohematológicas".

"Igualmente, para el resto de los pacientes, en los últimos años ha habido avances que van mejorando los resultados terapéuticos, sobre todo en aquellos añosos y/o que han recaído a tratamientos previos", indicó el comunicado difundido con motivo del Día Mundial de la enfermedad .

Para los pacientes que por su edad o estado de salud no pueden hacer quimioterapia, en el último tiempo se realizaron estudios que arrojaron que el uso combinado de dos drogas, -que están aprobadas y disponibles en nuestro país- redujeron el riesgo de muerte un 34% e incrementaron la sobrevida un 50% más que si solo se usa una de ellas (14,7 meses contra versus 9,6).

“Un aspecto importante, además, es que estos pacientes podrían realizar el tratamiento en forma ambulatoria porque uno de los medicamentos es inyectable, pero el otro es oral, a diferencia de los ciclos de inducción, consolidación y mantenimiento de quimioterapia, que requieren internacionales prolongadas”, agregó Rivas.

 

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