¿Dónde estabas el 15 de agosto de 1972?

Por Adolfo Pérez Mesas (adopem@yahoo.com.ar)

El 15 de agosto de 1972, llegué a mi casa cerca de las 23 horas, por entonces estaba terminando la secundaria en el Liceo Nocturno de Puerto Montt, mientras me desempeñaba como administrativo en la Oficina de Tierras y Colonización, dependiente del Ministerio de Tierras y Bienes Nacionales del estado chileno.

El país era gobernado por el presidente Salvador Allende, quien había llegado a La Moneda (palacio presidencial) apoyado por una coalición de partidos de izquierda que pretendía iniciar el rumbo al socialismo por la vía pacífica, contrarrestando otras ideas que miraban como único camino, la lucha armada.

El noticiero nocturno de las dos emisoras locales, Radio Vicente Pérez Rosales y Cooperativa, daban las primeras informaciones sobre la presencia en el Aeropuerto El Tepual de Puerto Montt de un avión que habría sido desviado desde Argentina por un grupo de presos de la cárcel de Rawson, cercano a la ciudad de Trelew.

Fue la primera vez que escuché hablar de Trelew, nunca imaginé que años más tarde ese sería mi lugar de residencia definitiva.

Al día siguiente, los medios locales incluyendo el diario El Llanquihue, informaban con mayor precisión sobre el espectacular y cinematográfico escape desde una cárcel de alta seguridad, ubicado en el sur argentino, donde se encontraban detenidos guerrilleros y presos políticos que se oponían al gobierno militar que presidía el General Agustín Lanusse.

Por esos años, muy poco sabía sobre la vida política del país al otro lado de la cordillera, estábamos sumidos en nuestro propio dilema, apoyando a un gobierno popular que hacía poco más de un año se había atrevido a expropiar la minería del cobre que estaba en manos de los norteamericanos y pasaba a ser propiedad del estado chileno. En 1972, la derecha criolla ya comenzaba a golpear los cuarteles donde finalmente un 11 de septiembre de 1973 un grupo de generales traicionó a su pueblo y puso en el poder a Pinochet, provocando la muerte del presidente constitucional, Salvador Allende.

Pero bueno, volvamos al 15 de agosto de 1972, a las 22 horas aproximadamente se encontraba en el aeropuerto de Puerto Montt el avión de Austral Líneas Aérea que operando el vuelo 811 había arribado con seis presos que habían escapado desde la cárcel de Rawson.

Esa noche, desde mi domicilio, donde vivía con mi esposa y mi hija de muy corta edad, ubicado en Urmeneta N° 1, observé el cielo que se encontraba encapotado y llovía sobre la ciudad de las cuatro colinas. Me imaginaba sobre cuál sería la situación de esos valientes argentinos habían protagonizado una fuga, que posteriormente supe había marcado la admiración mundial por lo intrépido de su planificación.

Siempre me quedó esa imagen de un cielo plomizo de intensa lluvia y desde mi lugar miraban en dirección al aeropuerto distante a unos 10 kilómetros de la ciudad.

Tres años más tarde, buscando libertad llegué sin saber a Trelew, lugar donde se había desarrollado este episodio que culminó con el fusilamiento de 19 presos políticos, tres de ellos, malheridos salvaron su vida. Aquí tomé conocimiento sobre los detalles y el fatal desenlace de los que fue la Masacre de Trelew. El 22 de agosto de 2007, con motivo de la inauguración del Museo de la Memoria, en el ex aeropuerto viejo, y cubriendo una nota para EL CHUBUT, tuve oportunidad de hablar brevemente con Fernando Vaca Narvaja, el exguerrillero montonero que tuvo una activa participación en la fuga. Solo quería cerciorarme si al pasar los años estaba en lo cierto respecto al día en que arribaron a Puerto Montt, "ese día llovía como pocas veces había visto llover", confirmando mis recuerdos de los años ‘70...

Llegaron pidiendo asilo para continuar a Cuba, mientras el gobierno de Lanusse​ presionaba al gobierno de Allende para que sean devueltos a su país. Un par de días después, los seis presos políticos o guerrilleros, como quieran llamarlo, fueron puestos en un avión y salieron rumbo a Cuba. Dicen, que el presidente Allende al momento de decidir, devolver o enviar a Cuba a los seis jóvenes, habría dicho: "somos socialistas y no vamos e entregarlos a una dictadura. Que viajen a Cuba"...