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Panorama Complicado: los frentes abiertos en Israel

El pasado 7 de octubre, militantes del grupo Hamás y de la Yihad Islámica cruzaron los límites de Gaza y se internaron a sangre y fuego en las localidades vecinas con el objetivo de matar y capturar israelíes. Hubo secuestros, violaciones, decapitaciones y mutilaciones de todo tipo a hombres, mujeres y niños.

 

No se trata de Fake News, hemos entrevistado a sobrevivientes y contamos con las filmaciones de los terroristas abatidos. En pocos días, Israel convirtió Gaza en una trituradora. Primero fueron bombardeos selectivos y luego una invasión por tierra. Finalmente, se invadieron los túneles y se avanza palmo a palmo sobre Rafah, a metros de la frontera egipcia.

 

Los 5 frentes del conflicto

El frente principal se centra en Gaza, pero el panorama es complejo. Varios grupos armados como Hezbollah, los rebeldes Hutíes, la Yihad Islámica y otros ejércitos irregulares atacan Israel desde varios puntos.

 

El segundo está en el Líbano/Siria. Hezbollah se mueve con total libertad ante un estado débil que no puede contenerlo. Desde allí lanzan cohetes y fuego de mortero contra las tropas fronterizas.

 

Yemen es un tercer frente lejano: los rebeldes Hutíes lanzan misiles de crucero contra el sur de Israel y contra los barcos que intentan atravesar el Mar Rojo.

 

El cuarto es Cisjordania, otro hervidero. Informes de inteligencia señalaban que Hamás estaba intentando atacar Israel desde los territorios palestinos. Todos los días hay operativos israelíes, muertos, detenidos y asesinatos selectivos, lo cual aumenta la ira palestina contra los judíos y contra la Autoridad Palestina de Mahmud Abbas, quien despotrica contra Israel, pero negocia para preservar su poder político.

 

Irán representa el quinto frente, aún más difuso. Está cerca de alcanzar la bomba atómica y es el enemigo declarado del estado israelí. Llamó a la lucha contra los judíos y norteamericanos. Si bien no ha entrado en combate franco, ha financiado y entrenado a los enemigos de Israel y se enarbola como defensor de la fe musulmana (en este caso la línea Chiita).

 

Torre de vigilancia en el muro que separa Israel de Palestina. Foto: Bruno Sancci.

Cómo ven a Hamás en Palestina

Los palestinos de Gaza tienen una posición ambigua con Hamás. Por un lado, se sentían representados por sus militantes y, por el otro, soportaban un gobierno que se la pasaba haciendo túneles y fabricando misiles para atacar Israel en nombre de la resistencia. Análisis previos señalaban que Hamás estaba perdiendo legitimidad debido a que los gazatíes preferían vivir en paz y en buenas condiciones en vez de estar todo el tiempo enfrentando a los israelíes por un pedazo más de tierra.

 

Fuera de la franja, en la otra palestina (Cisjordania), he hablado varias veces con personas que miraban a Hamás con simpatía porque sentían que eran los únicos

 

que plantaban bandera a Israel y confrontaban más directamente, pero, al mismo tiempo, decían no concordar con su extremismo. Las más críticas eran las mujeres, que se negaban a vivir en un islamismo radical que les quitaba todos los derechos solo por su condición de género. Con respecto al mundo LGBT+, obviamente, está prohibido por ley en Gaza.

 

La cuestión interna en Israel

A esta altura, el lector puede observar que no se trata de un solo escenario, sino de una complejidad de factores políticos, geográficos y religiosos. Y ni que hablar de lo que sucede dentro de Israel, que cuenta con una población variopinta que incluye a judíos de todo tipo y color, musulmanes, cristianos y drusos.

 

Si bien Netanyahu ha conseguido mantener el poder gracias a una coalición política, sus días están contados. La Corte Suprema de Justicia ha puesto límite a sus ambiciones de poder y la mayor parte de la gente rechaza su gestión y su apoyo a los colonos judíos ortodoxos que manejan los asentamientos.

 

Para colmo se han levantado sospechas sobre los kibutz destrozados por los terroristas, en los cuales vivían los judíos de izquierda que estaban a favor de la paz con los palestinos. Además, se supo que hubo información de inteligencia previa a los ataques que fue desestimada por el gobierno; lo cual agrava la situación política de Netanyahu.

 

Pedido de cuentas

En Israel se suele bromear con las diferencias: dicen que donde hay dos judíos hay tres opiniones contrapuestas, y es más o menos una realidad. Hoy el esfuerzo de la ciudadanía se centra en sobrevivir a los constantes misiles que parten de Gaza y del Líbano (sí, siguen lanzando misiles desde Gaza). Pero cuando acabe la ofensiva y Hamás sea militarmente más débil, la ciudadanía israelí va a pedir un cambio en las reglas de juego. Lo mismo sucederá con los Gazatíes y el resto de los palestinos, que exigirán cuentas por la sangría a los mandos de Hamás.

 

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