Peligro en las rutas

Sr. Director
Una vez más la ruta es campo propicio para la desgracia. Es doloroso descubrir en las líneas del periódico, que una vez más alguien sufre en terapia intensiva, como es triste recordar las cuatro vidas que ya se perdieron como consecuencia del caos que reina en las calles de la zona.

Oportunamente, durante el término administrativo anterior, los vecinos que circulamos por las vías rurales advertimos a las autoridades municipales sobre el peligro que representa la circulación de peatones y ciclistas de toda edad, a cualquier hora del día o de la noche, y en ciertos casos, sin las menores precauciones de seguridad, ignorando lisa y llanamente que están compartiendo la vía con camiones de gran porte, tractores, máquinas viales y últimamente, con creciente frecuencia, hasta con vehículos de los bomberos y de la Policía, cuyas funciones exigen altas velocidades.

Como respuesta subliminal descubrimos que, en lugar de controlar a los más pasibles de daño, evitando exponerse, se nos respondió con un cartel advirtiendo a los conductores que debían circular a menor velocidad, y luego, por un breve período, se dispuso el control vehicular en el cruce de calles, de modo de permitir la libre práctica deportiva.

Una de las reuniones convocadas a este fin, contó con la presencia del entonces director de Seguridad Vial de la Provincia, Don Leonardo Das Neves, a quien reiteramos los reclamos ya formulados al Municipio, insistiendo en la necesidad de un ordenamiento de la circulación, aunque sin resultados.
Ayer leemos en estas páginas, con un tanto de pena y otro de fastidio, que el ahora Ministro de Seguridad ha resultado víctima del desorden que prima en nuestras rutas, y habría atropellado a un infortunado deportista. «No haremos leña del árbol caído» somos solidarios, tanto con la víctima que sufre como con el conductor, para quienes este será un triste recuerdo por largo tiempo. Pero lo que sí haremos será reclamar con énfasis a los gobiernos Municipal y Provincial, ambos sumergidos en candente campaña electoral, que destinen más tiempo de sus días a la seguridad de los vecinos, tanto de los deportistas como de los conductores.

Y entonces, al decir de los abogados, será Justicia.

                                                                Ricardo Lagiard