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La energía nuclear afecta al ambiente | 7ma parte

La central nuclear de Indian Point, situada en el estado de Nueva York, dejó de operar definitivamente en abril de 2021, pero… ¿qué hacer con los remanentes radiactivos de la planta?

Andrew Cuomo gobernador del Estado de Nueva York, dijo: “He estado preocupado profundamente por la seguridad de la instalación de energía nuclear de Indian Point. No debe estar en el río Hudson, está muy cerca de la zona más densamente poblada del país”.

 

Ubicada en la localidad de Buchanan, a unos 40 kilómetros al norte de la ciudad de Nueva York, la planta entró en funcionamiento en 1962 y ha sufrido varios problemas operativos y de seguridad. Durante años ambientalistas y residentes de la zona insistieron sobre el cierre de la central.

 

Según el gobernador, con su cierre definitivo se puso fin “a la amenaza que la planta ha representado durante mucho tiempo para un área que es de vital importancia para nuestro estado, la nación y el mundo. Esta es una victoria para la salud y la seguridad de los neoyorquinos y supone un gran avance hacia el logro de nuestras agresivas metas de energía limpia”.

 

“La región circundante carece de rutas de evacuación viables en caso de un desastre, y la planta experimentó más de 40 eventos preocupantes de seguridad y operativos y el parón de unidades desde 2012”, agregó Cuomo.

 

Sin embargo, con el cierre definitivo no se terminó la afectación del medio ambiente. Mientras operaba, vertía líquidos de baja radiactividad al río Hudson.

 

Ahora, el nuevo propietario de la extinta instalación, Holtec International, a quién se le asignó la responsabilidad del desmantelamiento total y seguro, dice que planea verter al río alrededor de 4 millones de litros de agua radiactiva. La medida, que la compañía describe como la "mejor opción" para los residuos, podría ocurrir en agosto.

 

La reunión del 2 de febrero de la Junta de Supervisión de Desmantelamiento de Indian Point, se calentó cuando el propietario de la planta reveló el plan como parte de su largo proceso de desmantelamiento.

 

Los grupos ambientalistas y los residentes también están preocupados de que esto pueda dañar a su comunidad, ya que el río Hudson es ya un sitio sumamente tóxico. Holtec acordó avisar a la comunidad con al menos un mes de anticipación antes de que comience cualquier descarga radiactiva en el río.

 

Pero Holtec está dentro de sus derechos y permisos legales para descargar desechos al mismo ritmo que cuando operaba, y no necesita aprobación federal, estatal o local para descargar el agua contaminada. Esta práctica es estándar para las plantas nucleares.

 

Se argumenta que es una práctica normal, sin embargo, el agua contaminada podría descomponerse de forma natural y segura en donde está almacenada, sin necesidad de verterla.

 

Edwin Lyman, director de seguridad de la energía nuclear en la Unión de Científicos Preocupados, una organización de defensa de la ciencia sin fines de lucro está en desacuerdo. "Puede que solo cause un riesgo bajo para el medio ambiente hasta donde sabemos, pero hay otras opciones aquí, y ¿por qué no tratar de minimizar el daño?" dijo.

 

“Prácticamente todas las plantas nucleares en los EE. UU. descargan agua que contiene bajos niveles de radiactividad en la vía fluvial en la que están ubicadas”, declaró Neil Sheehan, oficial de asuntos públicos de la Comisión Reguladora Nuclear. “El tritio no se puede filtrar, pero una persona tendría que ingerir una cantidad significativa para que exista la posibilidad de un problema de salud y el agua radiactiva liberada se diluye en gran medida en el río.”

 

El agua que pronto será liberada ha sido tratada y filtrada con carbón vegetal y resina, que elimina los metales y el cloruro. Pero todavía contiene niveles bajos de tritio, una forma radiactiva de hidrógeno y un subproducto de la fisión nuclear, que podría acumularse en el río. Los seres humanos pueden inhalar o ingerir tritio, que emite bajos niveles de radiación beta a medida que se descompone y finalmente se convierte en helio. En grandes cantidades, puede elevar el riesgo de cáncer. El tritio y el helio no se pueden extraer del agua, ambos son químicamente similares.

 

Holtec recibió unos 2400 millones de dólares en fondos, a cargo de los contribuyentes, para desmantelar la planta. La población desea reutilizar el sitio. Holtec completará el desmantelamiento en 12 años. Pero Holtec y la comunidad circundante todavía están debatiendo qué hacer con los remanentes radiactivos de la planta.

 

(Fuente Periódico de la Energía)

 

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