Carta del Lector

El costo oculto del combustible nuclear II

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Las empresas multinacionales, hacen en otros países lo que no se les permite en países desarrollados. Al cesar actividades y retirarse, dejan grandes pasivos humanos y ambientales. (continuación)

Qué es y cómo nos afecta la radiactividad

 

Básicamente hay dos tipos de radiación: La no Ionizante y la Ionizante. Ejemplos de la primera son: la luz visible, los rayos ultravioletas e infrarrojos, ondas radioeléctricas, microondas.
La radiación ionizante comúnmente llamada radioactividad es la que nos preocupa por­que cuando es absorbida por los tejidos vivos, ya sea de nuestra piel u órganos, puede producir una alteración eléctrica lo suficientemente dañina como para causar la ruptura de la unión química que mantiene a los átomos ligados en forma de moléculas

 

La radiactividad se presenta en dos formas: partículas o rayos. Las partículas se pueden presen­tar en cuatro formas diferentes:

 

Partículas Alfa, Beta, Protones y Neutrones. Los rayos pueden ser Gamma o Rayos X.

 

Las sustancias peligrosas que son liberadas con la explotación del uranio se llaman radionucleidos. Estos emiten radiación en forma de: partículas Alfa y Beta y rayos Gamma.

 

Cuando un rayo, o una partícula entra en nuestro cuerpo, puede dañar a una célula de tal manera que ésta se multiplique, descontroladamente, produciendo un tumor maligno, es decir, cáncer.

 

El Uranio natural es radioac­tivo. Tiene un bajo nivel de radia­ción, pero es pernicioso igual.

 

¿Quién permitió permitir?

 

Los límites permisibles que recomienda el Consejo Internacional de Protección Radiológica no implican que, al estar expuestos a dosis menores, estemos seguros, sino que «son límites que significan un compromiso entre efectos perniciosos y beneficios sociales».

 

Para recomendar estos límites «permisibles» de exposición a la radioactividad, dicho Consejo tomó como referencia, los estudios hechos a los sobrevivientes de las explosiones atómicas de Hiroshima y Nagasaky.

 

Recientes análisis hechos por el Consejo Nacional de Investigaciones de Estados Unidos revelaron, que la radiación a la que hablan sido expuestos dichos sobrevivientes era menor a la estimada, por lo tanto, los niveles establecidos deben reducirse considerablemente, pero esto no ha ocurrido aún. Productos caseros tales como las «camisas» que se utilizan en los faroles a gas y kerosene se utiliza un producto radioactivo que contiene casi el doble de radioactividad que estos niveles permitidos ya obsoletos.

 

Más vale prevenir que curar

 

Un informe preparado en 1980 por la Asociación Médica de British Columbia (Canadá) a pedido del gobierno de esa provincia, nos advierte que: «Debido a la desintegración o decaimiento de los radionucleidos de larga vida, Radio y Torio, en las parvas de desperdicio de las minas de uranio, se produce un incremento gradual de emisiones de gas radón al ambiente por miles de años, convirtiendo el área alrededor de dichas parvas, en un lugar significativamente riesgoso para la salud y potencialmente inhabitable».

 

Otro problema que toca el informe son las graves consecuencias que han provocado accidentes ocurri­dos en Canadá, Australia, y los EE.UU., en diques donde se de­sechan restos de uranio molido mezclado con agua y ácido sul­fúrico.

 

Si la laguna de desechos del Complejo Uranífero Sierra Pin­tada (Mendoza) sufriera un acci­dente de este tipo, contaminaría al Rio Diamante, cuyas aguas abas­tecen las necesidades de la ciudad de San Rafael.

 

Por otro lado, serias dudas surgen sobre la seguridad que ofrecen las capas plásticas que cubren las bases de estas lagunas. En caso de que con el tiempo se rasguen, millones de litros de agua contaminada se filtrarían, a través del suelo, contaminando las napas subterráneas.

 

Contaminación de ríos y arroyos en la provincia de Córdoba ocasionó la clausura del Complejo Uranifero «Los Gigantes».

 

Nueva evidencia científica de los EE.UU. ha encontrado una estrecha relación entre la explotación del uranio y el incremento de niños deformes y cáncer.

 

De acuerdo con datos suminis­trados por el Registro de Tumores de Nuevo México (EE.UU.) en la zona de explotación de uranio el incremento de cáncer en los adolescentes es 15 veces más que el promedio de ese país.

 

En Mendoza la segunda causa de muerte es por cáncer de acuer­do a un informe publicado en 1984 por los médicos un número elevado de médicos liderados por el Dr. Norberto Dotti,

 

En la Argentina el uranio se utiliza como combustible para sus plantas núcleo-eléctricas y reac­tores nucleares experimentales. En otros países también se lo emplea para fabricar armas nu­cleares.

 

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